EN EL PUERTO DE QUEQUÉN Vecinos detienen la construcción de una planta de fertilizantes
Un grupo de vecinos autoconvocados que se viene organizando para la protección del medioambiente en Necochea, logró detener la construcción de una planta de fertilizantes de la empresa Pierdoce S.A. en el Puerto Quequén. No contaba con un informe de impacto ambiental adecuado y presentaba serias irregularidades administrativas pero la obra había sido aprobada el año pasado por el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable, la misma autoridad provincial que ahora la suspende.
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(Agencia) Necochea es una ciudad hermosa. Su puerto, su frente costero y el parque Miguel Lilio de 640 hectáreas hacen de la cabecera del partido una ciudad soñada para el turismo y el deporte. Sin embargo, sus más de 80 mil habitantes viven contaminados por los agrotóxicos, los deshechos cloacales y el continuo tránsito que se da al puerto sin que las condiciones de infraestructura sean las adecuadas. Frente a esto, un grupo de vecinos autoconvocados comenzó a organizarse para lograr instalar en la agenda de las políticas públicas la cuestión del medioambiente.
Mediante la protesta, y con el apoyo de organizaciones sociales y políticas de la región, lograron que el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable, que en primera instancia había autorizado la realización de las obras, de un golpe de timón y ordene “la suspensión de las obras por incumplimiento en las normas de seguridad y de cuidado del ambiente”.
Susana Laborde, una de las integrantes del grupo autoconvocado, explica que “las obras tenían un estudio de impacto ambiental aprobado pero con determinada cantidad de objeciones que no habían sido cumplidas, por eso el OPDS ordenó la suspensión en tanto no se cumplan con esos requisitos”. Sin embargo, Laborde, que es ingeniera y Jefa de Zona de la Dirección Hidráulica, señala que “es totalmente descabellado pensar que esa obra pueda seguir su curso porque en esa planta que quieren construir trabajarían con nitrato de amonio, lo cual entraría en contacto con los ductos de fuel oil de la central termoeléctrica de Necochea y podría generar una explosión. La combinación de esos dos químicos es lo que se utiliza en las minas para las detonaciones”.
Las obras estaban planificadas para realizarse dentro del área del Giro 11 y 12 de Puerto Quequén, que es la segunda cuenca más grande la provincia. La Ley provincial 12.257 que establece el régimen de protección, conservación y manejo del recurso hídrico de la Provincia de Buenos Aires, pone una restricción en la transferencia de tierras fiscales a menos de 150 metros de del límite externo de las riberas de ríos, arroyos, lagunas, canales, embalses y otros cursos de agua. Laborde explica que “esta normativa comprende al Giro 11 que tiene menos de 50 metros de ancho, así como una parte del Giro 12, por lo tanto es inviable que se haga alguna construcción”.
“Además, dentro del Giro 12 pasan los ductos que llevan el fuel oil a la central termoeléctrica, hacer una edificación con nitrato de amonio sería directamente criminal”, destaca Laborde y agrega que “el riesgo es tan elevado que cuando se hacen plantas de nitrato de amonio se pide autorización al RENAR -Registro Nacional de Armas-. No nos olvidemos que este lugar está a 200 metros de un barrio, de una escuela, de un jardín de infantes y del polideportivo municipal”.
Otro de los ejes que los vecinos autoconvocados presentaron ante el OPDS para frenar la construcción de la planta de fertilizantes fue la simulación del peligro que representan estas edificaciones en caso de una inundación -algo que ya sucedió en la década del 80-. “Naturalmente, es una zona de desborde de un curso de agua, si hubiera una inundación muy probablemente parte de ese material terminara en el medio del río o en la costa provocando un enorme impacto ecológico con el desparramo de nitrato de amonio en toda la costa de Necochea. Realmente es descabellado y de una irracionalidad total que se haya aprobado esto”, detalla la ingeniera.
Mientras tanto, los vecinos autoconvocados se encuentra a la espera de una reunión de la Comisión de Gestión del Puerto Quequén, presidida por Arturo Rojas, del partido Fe, liderado por el sindicalista Momo Venegas. Por su parte el intendente de Necochea, Facundo López del Frente Renovador, les entregó una carta en donde reconoce su desacuerdo con la continuidad de las obras e informó a los vecinos de la presentación de un pedido del ejecutivo ante el Consorcio del Puerto para que cesen.
“Rojas dijo que iban a hacer todo dentro de la ley, pero dentro de la ley se aprobó esta estructura con un informe de impacto ambiental absolutamente trucho, de lo cual no tengo dudas”, dice Laborde. “Nosotros habíamos presentado notas al OPDS durante todo el año pasado como vecinos autoconvocados junto a Centrales de la Costa S.A y el gremio Luz y Fuerza. Ninguna fue contestada, pese a que la ley dice que previo a la emisión del estudio de impacto ambiental tiene que contestar a todas las objeciones. Nosotros nunca recibimos ninguna respuesta y la declaración del estudio del impacto ambiental salió”.
Condiciones medioambientales
El Puerto Quequén está rodeado por dos ciudades: una homónima a su nombre y Necochea que es la cabecera del partido. En este sentido, el puerto no se encuentra separado en un área de seguridad, y sus actividades conviven con las rutinas cotidianas de los vecinos de la zona. Por tal motivo, todos los camiones que transportan carga para y desde el puerto lo hacen circulando de punta a punta por las ciudades para acceder a la ruta que va hacia Mar del Plata.
Hay un solo puente que soporta el peso de los camiones y se encuentra en el otro extremo de ambas ciudades. No hay ningún camino en la zona del puerto que permita que los camiones salgan del puerto y puedan tomar directo la ruta. Esto genera una continua polución a la que están sometidos los vecinos de la zona.
Además, en Necochea hay un basural a cielo abierto, no hay una planta de tratamiento y depuración de los desagües cloacales y el sistema de agua potable está colapsado. A esto se suma que es zona de fumigaciones por lo que muchas de las napas están contaminadas. Actualmente, los vecinos se encuentran reclamando una restricción de 1000 metros para la fumigación terrestre.
Susana Laborde cuenta que “Necochea no es una ciudad amigable ambientalmente porque desde la política hace años que no se toma el tema ambiental como un tema de agenda, como política de estado”. “Nosotros vivimos contaminados. El año pasado se murió una chica por la contaminación”, dice Susana en referencia a la muerte de Melina Nuñez, una joven de 19 años que falleció intoxicada con gas fosfina luego de un derrame de agroquímicos en Quequén.
Por el caso, los vecinos reclaman que la justicia condene a los hermanos Fernando y Emiliano Cañada por homicidio, dado que dicho derrame se dio por negligencia en la manipulación de los productos químicos que comercializaba la empresa Shipping Insurance S.A., registrada a sus nombres.
Los vecinos autoconvocados
El grupo de Vecinos Autoconvocados en Defensa del Parque Miguel Lillo y las Dunas Costeras se conformó hace 2 años, cuando dentro del ámbito legislativo de la municipalidad se presentó un proyecto para privatizar el Parque Miguel Lilio. El concejal a cargo de ese proyecto fue Pablo Aued, integrante del partido conducido por Momo Venegas.
Esta medida provocó una reacción vecinal que convocó a más de 1000 personas a protestar en el predio del parque. “Fue un inicio de la gente volviendo a la calle. Necochea es una ciudad muy tranquila, se conforma, no hay protesta, no se ve bien que haya protesta, como toda ciudad del interior. Pero a partir de que salimos con una ordenanza alternativa, para que el manejo del parque sea desde la ciudad, la gente empezó a participar”, cuenta Susana.
A partir de ese momento se empezó a conformar una organización en donde la prioridad era el cuidado ambiental de la zona y la defensa del espacio público. Así los vecinos se juntaron en grupos para capacitarse sobre ciertos temas de cuidado hídrico, fertilizantes, tierras y contaminación. Susana aclara: “No solamente hemos salido a la calle a protestar. Previamente nos informamos y salimos a contrarrestar las cuestiones con información técnica, legal y todo lo que se necesita para ir en contra en de cuestiones que tienen que ver con el poder”.