Persecución y accidente: lo encapuchan, lo patean y le roban
ANDAR en Pergamino
(Agencia) El viernes 16, cerca de la medianoche, Luciano, de 15 años, transitaba por la senda de un terraplén junto a dos amigas y un amigo. Él iba en su moto cuando un patrullero de la Comisaría Primera de Pergamino se dirigió hacia el grupo. Temiendo que los policías volvieran a secuestrar su moto por no tener la edad ni el carnet requeridos para circular, intentó alejarse del patrullero conduciendo a gran velocidad hacia su casa.
De acuerdo al relato del adolescente, luego de varias cuadras de persecución, cayó de su moto y fue increpado por los policías: le cubrieron el rostro para que no pudiera identificarlos; le dieron golpes de puño en el rostro y patadas en el cuerpo; lo hostigaron y amenazaron; y le quitaron el teléfono celular, que no recuperó.
La feroz golpiza habría sido efectuada por personal de la misma comisaría que, en la última semana de mayo, alojó a un grupo de niñas y niños –tres de ellos, de 10 años de edad- que habían sido detenidos por “ruidos molestos”, según la versión policial.
[pullquote]Chamut: “En Pergamino se vienen repitiendo casos de abusos y golpizas policiales contra menores de la ciudad y el riesgo es que los responsables no sean juzgados»[/pullquote]
En aquella oportunidad, mediante pericias médicas, se había logrado constatar las denuncias de los padres de los niños detenidos: en uno de los casos, por ejemplo, se verificaron las marcas y moretones en espalda y manos producidos por los golpes de los policías.
Ahora, el caso de Luciano vuelve a alarmar a Pergamino en torno a los procedimientos policiales arbitrarios y violentos dirigidos contra niños y jóvenes de entre 10 y 15 años. Nicolás Chamut, abogado de las madres de los niños y niñas detenidos y golpeados en mayo, se comunicó con la familia de Luciano y ya ha solicitado a la fiscalía ser incluido en el expediente judicial como patrocinante del joven.
“En Pergamino se vienen repitiendo casos de abusos y golpizas policiales contra menores de la ciudad y el riesgo es que los responsables no sean juzgados. Lo que se requiere, en términos generales, es personal especializado para tratar con jóvenes, algo para lo que los policías no están preparados ni habilitados a hacer”, señala Chamut.
Producto del accidente de moto y las agresiones de los policías, Luciano sufrió cortes e inflamación en sus labios, golpes en la mandíbula, perdió dos dientes y tiene una lesión en la zona de un oído por la cual tuvieron que realizarle una tomografía para evaluar la gravedad.
[pullquote]Ariel Bonanno, padre de Luciano, dijo: “Después que suturaron las heridas en el hospital, lo llevaron a Luciano a la comisaría. Él no podía caminar, prácticamente, e igual lo subieron a un patrullero. Ni siquiera había un defensor oficial ni nadie de fiscalía. Fue todo muy irregular lo que hicieron»[/pullquote]
Los padres de Luciano recién se enteraron de lo sucedido una hora después, a partir del llamado de una tía del joven. Los propios policías lo habían llevado al hospital para luego ingresarlo a la comisaría en calidad de “demorado”.
“Cuando llego al hospital, los médicos estaban a punto de realizarle placas. Vi que lo tenían en una cama con las manos esposadas y cuando me acerqué a mi hijo me di cuenta que casi no podía respirar porque se ahogaba con su propia sangre producto de los dientes que le habían partido durante la golpiza”, relata Ariel Bonanno.
“Después que suturaron las heridas en el hospital, lo llevaron a Luciano a la comisaría. Él no podía caminar, prácticamente, e igual lo subieron a un patrullero. Ni siquiera había un defensor oficial ni nadie de fiscalía. Fue todo muy irregular lo que hicieron, a tal punto que me fui del hospital sin un certificado de la atención médica que le habían realizado a mi hijo”, agrega el padre.
Dos son las investigaciones que se realizan sobre lo sucedido el viernes por la noche: en fiscalía de menores tramita el expediente por presunta resistencia a la autoridad, según denunciaron los policías de la Comisaría Primera.
[pullquote]»Vamos a ir hasta las últimas consecuencias y a apoyar a cualquier otra familia que pase por la misma situación”[/pullquote]
En fiscalía de adultos tramita la investigación de la golpiza, en torno a la cual no hay, hasta el momento, policías sospechados de haber sido parte de las agresiones. De hecho, al haber permanecido encapuchado, Luciano no pudo identificar a ninguno de sus agresores y tampoco se han hallado testigos.
“Esto de mi hijo es la primera vez que le pasa, pero sé que en Pergamino la policía está pegando mucho a los chicos. Luciano está mal, muy angustiado, con la vista perdida y se asusta mucho cuando ve pasar un patrullero por la calle. Por eso nosotros no vamos a permitir que no se encuentren a los responsables. Vamos a ir hasta las últimas consecuencias y a apoyar a cualquier otra familia que pase por la misma situación”, afirma Ariel Bonanno.
Lanzan en Pergamino Campaña contra la Violencia Institucional
El próximo 30 de agosto, en la sede de Pergamino de la Universidad Nacional del Noroeste de Buenos Aires (UNNOBA), se realizará la presentación de la Campaña contra la tortura de la Comisión por la Memoria de la Provincia de Buenos Aires, en la que participarán como disertantes algunas de las madres de los niños y niñas golpeados por policías de la ciudad en mayo pasado, así como los padres de Luciano y el abogado Nicolás Chamut.
Entrevista a Luciano, por canal local Somos Pergamino