Rojas: un oficial de la Bonaerense fue detenido por el femicidio de su ex novia y la policía reprimió la marcha reclamando justicia
Úrsula Bahillo fue asesinada a puñaladas por su ex novio Matías Ezequiel Martínez, oficial de la Policía de la Policía de la Provincia de Buenos Aires que estaba con carpeta psiquiátrica desde septiembre pasado. Úrsula tenía 18 años y ya había denunciado a su ex pareja por violencia de género. Luego del femicidio, la familia de la joven encabezó una marcha de justicia que, cuando llegó a la comisaría de Rojas, terminó en una violenta represión policial: hubo heridos, entre ellos una amiga de la víctima que recibió un disparo con bala de goma en el ojo, y nueve detenidos. Esta tarde habrá una nueva marcha en medio de un enorme despliegue de efectivos de la Bonaerense, el grupo GAD y Gendarmería Nacional. Según el registro de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), este es el 23° femicidio perpetrado por efectivos policiales en la provincia desde el 2016.
ANDAR en Rojas
(Agencia Andar) “Nunca creí estar denunciando a alguien por violencia de género. Quiero ser la última”, había escrito Úrsula Bahillo en su cuenta de Twitter el viernes pasado. Para ese entonces, ya había realizado 18 denuncias contra su ex pareja, Matías Ezequiel Martínez (25 años), oficial de la Policía Bonaerense que estaba con carpeta psiquiátrica desde septiembre de 2020 y tenía una medida de restricción perimetral para impedir que se acerque a la joven.
Ayer, en una zona rural de Rojas, Martínez asesinó a puñaladas a Úrsula. Luego del ataque, el agresor llamó a su tío y le confesó: “Me mandé una cagada”. Cuando el familiar llegó al lugar con efectivos policiales, intentó escapar pero fue detenido, antes se había autolesionado en el abdomen con la misma arma homicida. A pocos metros, encontraron el cuerpo de la joven ya sin vida, con varias heridas en la espalda y el cuello.
Según el registro de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), en su carácter de Mecanismo Local de Prevención de la Tortura, desde el 2016 hasta la fecha hubo 23 femicidios perpetrados por efectivos de seguridad en la provincia de Buenos Aires.
Tras conocerse el crimen en Rojas, un pueblo de unos 2.000 habitantes, los vecinos y vecinas se reunieron frente a la Municipalidad para acompañar el reclamo de justicia de la familia de Úrsula. Cuando la marcha llegó a la comisaría local, en un clima de creciente tensión e indignación, efectivos policiales reprimieron con disparos de bala de goma y gases lacrimógenos.
Entre la decena de heridos, se encuentra una amiga de Úrsula que recibió un disparo en uno de los ojos y fue trasladada al Hospital de Junín. Además, hubo nueve manifestantes detenidos por los daños producidos en la comisaría y en un móvil policial, que recuperaron la libertad a las pocas horas.
“Hace meses habíamos denunciado el hostigamiento de esta persona hacia mi hija, hasta un fin de semana que fuimos a la Comisaría de la Mujer y nos mencionaron que no tomaban la denuncia porque era fin de semana”, señaló su madre durante la protesta frente a la comisaría.
A raíz de estos hechos, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), en calidad de Mecanismo Local de Prevención de la Tortura, realizó una serie de presentaciones ante la UFIJ N° 5 de Junín donde tramita la causa por el femicidio y también ante la Fiscalía General y la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio provincial de Seguridad para que se investigue el accionar de los funcionarios policiales que participaron de la represión.
Esta tarde a las 17 horas, familiares, amigos y amigas de Úrsula volverán a marchar para exigir que la justicia, que durante meses desoyó las denuncias de la víctima, actúe con celeridad. La marcha se realizará en una ciudad que se encuentra inmersa en un enorme despliegue de fuerzas de seguridad que llegaron para reforzar la cantidad de efectivos en Rojas.