GATILLO FÁCIL Rematado por “legítima defensa”
En medio de una pelea en el barrio El Sol, Merlo, un gendarme mató a un joven de 22 años de dos tiros, uno en la cabeza. La fiscalía caratuló la causa como “legítima defensa” validando el testimonio del gendarme y las declaraciones tomadas por la policía. Organismos de derechos humanos intervinieron pidiendo informes y pericias
ANDAR en Merlo
(Agencia) Hubo una pelea. En eso coinciden todos en el barrio El Sol, de Merlo. Hubo tiros también. Germán, de 22 años, cayó al suelo con un balazo en la cabeza y otro en el torso. En medio del tumulto alguien había llamado a un vecino gendarme que llegó con su arma reglamentaria. En las declaraciones tomadas en la comisaría aparece la versión de que Germán también estaba armado; por eso la fiscalía 4 de Morón caratuló la causa como legítima defensa aunque no dispuso repetir las testimoniales en sede judicial. Tampoco llamó la atención del fiscal que fue Felipe Villaba, el gendarme que asesinó a Germán, el que se llevó el arma que supuestamente tenía la víctima. Así el muerto sería el imputado por tentativa de homicidio.
“La fiscalía toma las declaraciones que fueron hechas en comisaría y se le atribuye toda la culpa a Germán. Pero hay varios elementos que llaman la atención y acá es necesario saber qué fue lo que pasó realmente, cómo se dio toda la situación porque hay versiones totalmente diferentes. Acá el gendarme lo remató de dos tiros”, dice Juan Mauro Virzi el abogado de la Campaña contra la violencia institucional que acompaña a la familia.
A los pocos días del crimen en el barrio se volvió a desatar la violencia cuando los vecinos vieron que Villalba ya estaba en libertad. “Pueblada en Merlo” tituló Crónica que registró el cruce de la gente del barrio con los gendarmes y policías que dispusieron un operativo alrededor de la casa de Villalba.
“Se pidieron informes de porqué se hicieron los procedimientos policiales de esa manera. Se está realizando un acompañamiento a la familia de la víctima, porque es una situación complicada, de mucho dolor. Tratamos todo el tiempo de garantizar su derecho a la verdad”, explica Marcela Maidana, la directora del área de derechos humanos de la municipalidad de Merlo que está en contacto con la familia de Germán. Fueron ellos quienes los vincularon con la campaña contra la violencia institucional y la Comisión Provincial por la Memoria (CPM). Desde la CPM se solicitaron informes a la fiscalía.
Ahora se esperan los resultados del dermotest para ver si existían rastros de pólvora en las manos de los dos principales involucrados, una prueba fundamental para avanzar en la investigación.