Rauch: la fiesta termina cuando la policía reprime
Las agrupaciones estudiantiles de Rauch tienen su fiesta al iniciar cada enero desde hace años. El último encuentro finalizó con una intervención policial violenta y desmedida. La excusa fue separar una pelea que ya había terminado. Jóvenes y mujeres heridas, empleados municipales baleados, detenidos y preocupación en la comunidad. Todos los relatos coinciden en que fue la policía la que desató la violencia.
ANDAR en Rauch
(Agencia Andar) “Es la primera vez que hay una represión así en Rauch”, asegura Joaquín aún impresionado por la violencia que desplegó la policía el fin de semana pasado durante la Fiesta de las Agrupaciones en el Balneario Municipal. Él era uno de los asistentes a la fiesta que se hace desde hace una veintena de años en la localidad y reúne agrupaciones estudiantiles y egresados de los colegios secundarios.
Esta vez, el evento terminó con chicos y chicas heridos y 4 detenidos tras la intervención de fuerzas policiales. “No hubo ningún suceso para que la policía actuara de esa manera. Existió una discusión pero la pelea había terminado cuando empezaron a disparar y los golpes”, dice Joaquín en diálogo con Andar. Los relatos de los testigos coinciden: la intervención fue, al menos, desmedida y generó una mayor violencia. Hubo jóvenes y hasta empleados municipales heridos.
“La policía sin necesidad, sin respetar protocolo alguno y sin la coordinación de ningún funcionario, decide descargar postas antes de hablar y resolver los conflictos”, denuncian en un comunicado desde el Colectivo de Jóvenes Contra la Violencia Institucional que se conformó tras los hechos. En el operativo, a cargo de comisario de la localidad, Marcelo González, intervino personal policial local y del Grupo GAD.
“Nunca vi el lugar tan militarizado”, señala Joaquín que responsabiliza a las autoridades municipales del accionar de las fuerzas de seguridad. Su hermano fue uno de los detenidos que además sufrió las agresiones policiales durante la aprehensión y en el trayecto a la comisaría. En la dependencia policial los amenazaron y les hicieron limpiar los baños de los calabozos como método de humillación.
Desde el Colectivo de Jóvenes Contra la Violencia Institucional están preocupados y quieren darle difusión a lo sucedido y buscar asesoramiento de organismos para radicar la denuncia correspondiente. Por ahora tomó intervención la Ayudantía Fiscal local a cargo de la Dra. Adriana Hernandorena y la UFI Nº 1 con asiento en Azul a cargo del Dr. Marcelo Fernández. Las 4 personas demoradas fueron acusadas de «atentado y resistencia a la autoridad agravada en banda».
“En este contexto, donde la respuesta de la policía ante todo es tirar, donde los responsables de controlar el accionar policial se dedican sistemáticamente a defender los abusos de la fuerza, donde el silencio reina frente a la bronca de las postas recibidas, este colectivo dice basta y pone una voz de alarma ante la posibilidad de que esto sea una práctica habitual contra los jóvenes en nuestra ciudad”, dicen quienes se agruparon contra la violencia y convocan este domingo 7 a la Plaza Mitre a un encuentro cultural para repudiar lo sucedido.