SITIO DE MEMORIA: LA DISPUTA POR EL ESPACIO Puesta en valor de la casa de la CPM
En 2001 la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) tomó posesión del edificio donde funcionó la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (calle 54 nº 487 de La Plata), asumiendo el mandato y el compromiso político, histórico y ético de recuperar el espacio como un sitio de memoria y como un espacio para la promoción de las políticas de memoria y la defensa de los derechos humanos.
ANDAR en la memoria
(CPM/Agencia) La reciente resolución del Ministerio de Infraestructura de la provincia de Buenos Aires, por la cual se llama a licitación para la ejecución de la obra tendiente a la “recuperación y puesta en valor del edificio de la Comisión Provincial por la Memoria”, reconoce su valor histórico y fortalece el trabajo que diariamente realiza la CPM como organismo público.
La obra será financiada con recursos provenientes del Fondo Fiduciario para el Desarrollo del Plan de Infraestructura Provincial en el marco de la Resolución N° 24/16; en este sentido, es el resultado de una gestión que fue iniciada durante el anterior gobierno y que sigue vigente en la actualidad. La continuidad de este proyecto da cuenta del compromiso histórico que la sociedad en su conjunto asume en la promoción de las políticas de memoria.
En esta casa funcionó durante años la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (DIPPBA). En 2001, cuando la CPM tomó posesión del edificio también fue mandatada por ley a gestionar el acervo documental de la DIPPBA. Por eso es tan crucial la recuperación y puesta en valor de este lugar desde donde se vigilaba y perseguía a los ciudadanos; este acto es en sí mismo un hecho reparatorio y constituye también una de las formas de la memoria. Cada año el archivo es consultado por miles de ciudadanos: sus documentos han sido y son aportes para las causas judiciales contra los responsables de delitos de lesa humanidad, la averiguación de datos referentes a las personas y la investigación histórica y periodística.
La casa donde funcionó la DIPPBA tuvo varias modificaciones edilicias; una de las más visibles fue en el año 1976, cuando se construyó una garita de vigilancia que avanzaba sobre la línea municipal. Como ocupaba una parte de la vereda, interrumpía el paso de los peatones y subrayaba la presencia del edificio. En un trabajo realizado por la CPM con las memorias de los vecinos del barrio quedó demostrado, además, cómo el uso que las fuerzas policiales le dieron al edificio durante los años de la dictadura lo convirtió en un emblema que todavía hoy es asociado a lógicas de amedrentamiento, persecución y horror y que atravesaron la vida cotidiana de las personas que residían en las zonas más próximas.
En la actualidad, por este edificio también pasan diariamente estudiantes, docentes y público general que participan de visitas guiadas, actividades culturales, jornadas de debate y capacitación, entre otras propuestas. En definitiva, como un espacio de participación y encuentro que nuclea las múltiples líneas de trabajo que desarrolla la CPM. Esta puesta en valor no hace más que renovar el desafío que el organismo se ha propuesto desde su creación: el compromiso con la memoria del terrorismo de Estado y la promoción y defensa de los derechos humanos