PRESA POR MALA MADRE Organizaciones de mujeres piden la libertad de Yanina Farías
Yanina Farías era víctima de violencia de género y su hija de 2 años fue asesinada el año pasado por José Alfredo Leguizamón, el hombre con el que convivía en Moreno. Hace más de 10 meses que está presa; la fiscalía la acusa de que “debió velar por la integridad de su hija” sin contemplar las condiciones de violencia doméstica en la que la joven estaba inmersa. Este 5 de julio, la Red de Mujeres de Moreno junto a otras organizaciones feministas, sociales y políticas convocan a una jornada en los tribunales de Mercedes para exigir su inmediata liberación. La CPM acompaña el caso.
ANDAR en Moreno
(Agencia) Este 5 de julio la familia de Yanina Farías y las mujeres que integran la Red de Mujeres de Moreno -acompañadas por organizaciones feministas, sociales y políticas- realizarán una jornada frente a los Tribunales de Mercedes para exigir la inmediata liberación de la mujer y que ella pueda esperar el juicio oral en su casa junto a sus otros dos hijos pequeños que actualmente están al cuidado de su abuelo.
El 6 de agosto del año pasado José Alfredo Leguizamón asesinó a Xiomara de 2 años de edad, hija de Yanina Farías. La joven convivía hacia 20 días con Leguizamón. Su madre le había pedido que cuidara su casa mientras ella hacía un viaje. Yanina fue junto a sus dos hijos de 2 y 4 años a ese lugar donde también estaba alojado el femicida. La joven fue víctima de golpes, extorsión, violaciones sistemáticas y castigos violentos a sus hijos. El 4 de agosto, luego de violarla una vez más y golpearla hasta desvanecerla, Leguizamón lastimó severamente a ambos niños, dejando a Xiomara gravemente herida. Esos golpes le produjeron la muerte dos días después.
Leguizamón fue detenido y acusado de homicidio. Al mismo tiempo, el titular de la Unidad Funcional de Instrucción 4, Gabriel Lorenzo, pidió al Juzgado de Garantías 1 a cargo de la jueza Adriana Julián que ordene el arresto de Yanina. El cargo que pesa sobre ella es homicidio agravado por el vínculo. El 2 de marzo el juzgado pidió la elevación a juicio de la causa. Según la fiscalía, Yanina “debió velar por la integridad de su hija, y representándose que, con su inacción y por la violencia inusitada puesta de manifiesto a través de las lesiones que se ocasionaren, provocara el desenlace irremediable de la muerte de su propia hija”.
Yanina Farías tiene 30 años y retraso madurativo. Está presa y acusada por “mala madre”. Como Yanina González y Celina Benítez, casos emblemáticos donde la justicia patriarcal condenó a las mujeres de no haber podido resguardar la vida de los hijos sin considerar que ellas también eran víctimas y fueron sometidas a todo tipo de tortura doméstica.
En marzo la defensora oficial de Yanina exigió el cambio de calificación de la causa y su sobreseimiento, pero la Sala 3 de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de Mercedes confirmó el 28 de marzo la resolución de la jueza. También le fue negado el pedido de prisión domiciliaria pese a tener dos hijos más y un domicilio legal donde alojarse.