ESPECIAL MONTE PELLONI Omar «Pájaro» Ferreyra habló en la última audiencia
En la última jornada de audiencias, previo al veredicto, el Tribunal concedió la palabra al imputado Omar Antonio Ferreyra. A diferencia de los demás acusados, hizo uso de su derecho.
ANDAR en los juicios
(AC-FACSO) Ante un recinto colmado y el público con ansias por conocer el veredicto, cerca de las 11:30 comenzó la última audiencia del juicio. El Tribunal Oral Federal de Mar del Plata, previo a la lectura del veredicto, concedió el derecho de última palabra a Omar Antonio «Pájaro» Ferreyra quien por cuestiones de salud no pudo hacerlo en audiencias previas. Sorprendentemente Ferreyra optó por hablar.
«No pido clemencia, pido verdad y justicia» comenzó el imputado quien deberá responder por las muertes de Jorge Fernández y Alfredo Maccarini y la aplicación de tormentos hacia aproximadamente otras 20 personas. Además leyó una breve reseña que redactó durante los últimos seis años en los que estuvo detenido en la Unidad Penal Federal de Marcos Paz. p1 «Desde hace seis años estoy ilegalmente detenido y durante este tiempo leí la causa que esta cimentada en mentiras» sostuvo. Tmabién indicó que se está juzgando algo que pertenece a «un triste y lejano pasado». Por último cerró su declaración invocando a Dios e interpeló al Tribunal: «Como cristiano pido a Dios que ilumine vuestro camino para la búsqueda de la verdad». Sin más palabras el juez Roberto Falcone pasó a un cuarto intermedio hasta las 13:30 horas que será la lectura del veredicto.
El ex cabo Omar Antonio «Pájaro» Ferreyra, fue partícipe del operativo de entrega del cuerpo de Jorge Oscar Fernández a su familia, y está acusado además de torturas y tormentos. Fernández fue secuestrado el 16 de septiembre de 1977 y asesinado en Tandil tiempo más tarde; anteriormente había estado detenido junto a su hermano Osvaldo Roberto en Monte Pelloni.
Ferreyra fue director de Control Urbano desde 2003 hasta 2007 en el municipio de Olavarría durante la gestión del intendente Helios Eseverri, quien se negó a removerlo del cargo a pesar de distintas solicitadas, denuncias de organismos de derechos humanos y escraches públicos. Fue apresado el 16 de julio de 2009 en su domicilio de Olavarría y trasladado al Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz, donde actualmente continúa preso.