CONFERENCIA DE PRENSA TRAS EL ATAQUE A DANIEL MANCINI Nada podrá detener la lucha por justicia
Familiares, víctimas y testigos del juicio contra 11 policías por las torturas a tres jóvenes y el asesinato de Fabián Gorosito realizaron una conferencia de prensa frente a los tribunales de Morón para denunciar el ataque violento que sufrió en la madrugada del sábado Daniel Mancini, víctima y querellante del proceso judicial. Este hecho es el último de una escalada de violencias, amenazas y hostigamientos que vienen sufriendo desde el comienzo de las audiencias. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) participó de la conferencia y sigue reclamando que se tomen medidas urgentes de protección para el resto de las víctimas y testigos.
ANDAR en Merlo
(Agencia Andar) “Soy la mamá de Fabián Gorosito, asesinado el 15 de agosto de 2010, en la comisaría de Mariano Acosta, por 11 policías. Hoy esa misma policía nos sigue amenazando y amedrentando”, dijo María Viera durante la conferencia de prensa brindada frente a los tribunales de Morón, antes de una nueva audiencia por el segundo juicio contra 11 policías y una mujer de civil acusados por las torturas contras tres jóvenes y las torturas y muerte de Fabián. Junto a ella, estuvo José Mancini, hermano de Daniel, y otra de las víctimas de torturas que participa como querellante en este juicio.
La madrugada del sábado, cuatro hombres encapuchados, armados y disparando tiros al aire ingresaron violentamente al domicilio de Daniel Mancini. Ya adentro de la casa, los hombres amenazaron y golpearon a culatazos a Daniel provocándole graves heridas que obligaron a su internación. Todo esto sucedió ante la sospechosa ausencia de la custodia designada judicialmente para la protección de las víctimas del juicio.
“La custodia se fue de mi casa supuestamente a cenar y no volvió más. Una camioneta Dunster con vidrios polarizados embistió contra las rejas de mi casa y después esa misma camioneta fue hasta la casa de Daniel. La policía hace lo que quiere”, contó María Viera. Este hecho es el último de una serie de amenazas y hechos intimidatorios que vienen sucediéndose desde el comienzo del segundo juicio.
“Hace una semana, cuando volvíamos los cuatro —ella, los hermanos Mancini y Maximiliano Silva— de una reunión con nuestro abogado, patrulleros sin patente rodearon nuestro auto y nos siguieron así por varias cuadras”, agregó María Viera. Por ese hecho, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) presentó un habeas corpus preventivo ante el Juzgado de Garantías 6 de Morón que fue rechazado sin escuchar a las víctimas. El episodio del sábado a la madruga vuelve a exponer la complicidad o, por lo menos, la inacción de la justicia que permite estos niveles de impunidad y pone en riesgo a las víctimas, familiares y testigos.
“La corrupción empieza adentro de los tribunales; la justicia no está para los pobres y solo nos queda hacer esto para que nos escuchen”, señaló José Mancini durante la conferencia de prensa. Y agregó: “Nos quieren proteger los mismos policías a los que le estamos haciendo juicio, los mismos policías que me torturaron toda una noche y un día”.
12 de agosto de 2010: Maximiliano Silva, Daniel Mancini y José Ismael Mancini fueron secuestrados por un grupo de policías vestidos de civil y trasladados a la comisaría 6ª de Mariano Acosta, Merlo. En la dependencia policial, los tres jóvenes fueron torturados. Esto sucedió tres días antes del asesinato de Fabián Gorosito. El operativo que terminó con las torturas a Maximiliano, Daniel y José supuestamente buscaba el arma que el oficial Giménez había denunciado robada de su propia casa; en realidad Giménez buscaba a Fabián Gorosito para cobrarse una venganza personal.
Estos dos hechos consecutivos son los que están ventilándose en el segundo juicio que comenzó; el primero fue anulado por el Tribunal de Casación Penal bonaerense que consideró que había estado plagado de irregularidades. Incluso, por los hechos de tortura contra los tres jóvenes, el policía Ángel Manuel Sosa fue condenado a 13 años de prisión.
Al momento de presentar el habeas corpus, la CPM ya había denunciado que “la falta de protección para víctimas, abogados, testigos y familiares resulta fundamental en un proceso de estas características donde los acusados – todos policías en funciones – tienen todavía la capacidad de seguir atacando, hostigando y amedrentando a sus víctimas”. Y tras el violento ataque a Daniel Mancini exigió que se inicie una investigación urgente y reclamó protección para el resto de las víctimas y testigos.
En esa misma línea, durante la conferencia de prensa, María y José coincidieron en señalar que el sistema de custodia no funcionó, que la justicia estaba al tanto de que actos hacía podían suceder pero no hicieron nada para evitarlos. “Sé que los responsables del asesinato de Fabián buscan que abandone la lucha, pero cada día me siento más convencida de seguir”, aseguró María Viera. Nada podrá detener la lucha por justicia.