“Los vi venir dispuestos a golpearme”
Un joven fue golpeado por dos policías después de caer al piso. Radicó la denuncia en la fiscalía de Campana que también investiga otros casos de violencia policial.
ANDAR en Zárate
(Agencia) “En la madrugada del sábado, después de salir estábamos con un amigo charlando en una esquina del centro de Zárate y llegó un patrullero diciendo que nos vayamos a dormir”, cuenta Nadir. Él les respondió que no se iba a ir porque no estaba haciendo nada, “pero eso no les cayó nada bien a los efectivos y veo que se me vienen encima, dispuestos a golpearme”, agrega. Nadir salió corriendo pero tropezó, y una vez en el piso los agentes policiales lo golpearon hasta que se desvaneció. No se llevaron a nadie detenido, no dieron explicaciones acerca del procedimiento y se fueron.
Aturdido volvió a su casa gracias a la ayuda de una pareja de transeúntes que lo auxilió, luego de que él se negara a subir a un patrullero que quiso llevarlo al hospital “me niego porque era bastante obvio, me habían pegado ellos no voy a subirme a otro patrullero para quedar a su disposición y que me hagan lo que quieran”, explica. Al día siguiente cuando vio las marcas de los golpes en su cara fue al hospital y al día siguiente accedió a hacer la denuncia.
Radicó la denuncia en la UFI N° 1 en Campana, a cargo del Dr. Montani, donde también se investigan otros casos de violencia institucional de la zona como el de Joana Esquivel, asesinada por un agente de las fuerzas de seguridad en una zona periférica de Zárate.
Juan Manuel Aolita, el director de derechos humanos del municipio, exigió el pronto esclarecimiento del caso y adelantó que están evaluando presentarse también como particular damnificado ya que “hay un aporte y una intervención de recursos en seguridad por parte del municipio que muchas veces coordina y acompaña a las unidades policiales que entendemos que nos lleva a asumir esto como una responsabilidad ciudadana”, fundamentó el funcionario.
En ese marco desde el municipio podrían aportarse como pruebas en la investigación del caso de Nadir el registro de ese monitoreo de las unidades móviles que realizan a través de cámaras y dispositivos de GPS.
La dirección de DDHH local en el último año trabajó en 4 denuncias de violencia institucional, entre las que se encuentra el caso de Joana Esquivel y la muerte de Matías Barreto que también tuvo un gran impacto en la comunidad. “La violencia institucional es un fenómeno instituido desde ámbitos corporativos que escapan al control del mismo estado de derecho”, define Aolita. “Por eso en general se promueve a toda la sociedad para que ante casos de violencia de este tipo se acerquen a las dependencias para recibir asesoramiento”, agrega.