CRÓNICA DESDE LAS SIERRAS Los sin tierra de Tandil
Descendieron del cerro, algunos con autos cargados de personas, otros caminando. La lluvia no pudo frenar sus reclamos.
ANDAR en Tandil
(Radio Cumpa/ Corresponsalía agencia) Era lunes 3 de noviembre a las 9hs y en la puerta del municipio los vecinos de Villa Cordobita, barrió ubicado detrás de uno de los cerros más conocidos de la Ciudad de Tandil se encontraban con sus pilotos, con su pancartas y con el pedido que le regularicen la posesión de las tierras que hace años, que cuidan, protegen y viven.
Una vez dentro del palacio municipal el sonido de los bombos retumbaba con la acústica de mármol, lo canticos venían a poner a la luz un negociado entre pocos. El grito de los ciudadanos, tiene su nacimiento a partir de un intento de desalojo resistido el día jueves 23 de noviembre. En estos lotes viven tres familias que tienen la posesión hace más de un año.
El conflicto inició la solidaridad de los vecinos, primero acercándose a resistir contra la policía después acompañar algún matecito junto al fuego. Pero la lucha se iba convirtiendo de singular a comunitaria, y en ese caminar el reclamo no iba por la defensa de cuatro familias porque en el barrio se sabía que si desalojan a una, desalojan a todas.
Por eso los vecinos tocaban, gritaban y ensordecían a cualquier representante del pueblo dentro del edificio municipal. Porque para algunos no tengan acceso a la tierra es porque otros tiene más. En esta historia, los que tienen más, son una asociación ilícita que conformada por abogados, funcionarios municipales y funcionarios judiciales que se apropian de las tierras fiscales utilizando herramientas legales e información que solo ellos tienen debido al lugar que ocupan en el estado.
La movilización terminó con la entrega al Concejo Deliberante de un petitorio para que traten en la próxima sesión, la legalización de los terrenos y la investigación de algunos funcionarios. Afuera llueve, y los vecinos al toque de bombo se van. Se organizan en los autos para volver al cerro de donde son de donde viven.
Esos terrenos fueron propiedad de la empresa Tandilia SRL que quebró en la década del 50′ , abandonando las propiedades. En estos lotes muchas familias ejercieron la posesión pacifica a fines de los ’90, producto de la necesidad a la tierra y la vivienda digna, proceso que sigue hasta la actualidad en los terrenos libres. En el 2006 las tierras pasaron al gobierno local, al hacerle este último un juicio a la empresa quebrada.
Esta realidad, no es la de un solo barrio en Tandil, ciudad soñada por unos pocos. Son muchas familias sin techo, invisibilidades que esperan, resisten y luchan por una vivienda y un poco de dignidad. Por eso el conflicto continúa y los rumores de nuevos intentos de desalojos surgen a diario.