BEA SILVANE, COMPAÑERA GASTÓN DUFFAU La justicia, la lucha y la esperanza
A Gastón Duffau la policía lo asesinó a golpes en febrero del 2008, en Ramos Mejía. Ocho años después, dos juicios y absoluciones mediante, la familia logró que los agentes responsables de su muerte sean condenados a prisión perpetua. Entrevista con la compañera de Gastón, Bea Silvane.
ANDAR en la justicia
(Agencia) ¿Cuál fue la primera sensación al recibir la noticia de la condena?
En el momento me sentí muy emocionada porque fueron muchos años en que estuvimos tratando de que se haga justicia, y lo peor, lo más difícil de aceptar era lo que estaba pasando en La Matanza. Porque ya parecía que de manera caprichosa los tribunales de La Matanza, los jueces de La Matanza, no había forma de que condenen algo que era muy obvio. Entonces sentíamos mucha impotencia, como que eternamente teníamos que estar peleándola. No se puede tapar el sol con la mano cuando los hechos son tan evidentes no pueden tomarle el pelo a la sociedad como lo venían haciendo los tribunales de primera instancia.
A mí en lo personal también me satisface porque sé que hay muchos familiares que están en un camino como el de nosotros y que están esperando que se haga justicia, entonces hay una luz de esperanza.
¿Cómo fue ese proceso de búsqueda de justicia para ustedes?
Tuvimos un primer mal juicio en La Matanza, fuimos a la Cámara, anuló el fallo, ordenó un nuevo juicio, esperamos que con ese juicio nuevo se hiciera justicia y de alguna manera ridícula los jueces dijeron: “está bien, fueron ellos, pero no tuvieron la intención de matarlo, actuaron con negligencia” y los vuelven a absolver. Entonces personalmente teníamos mucho miedo, o yo por lo menos. No podía aceptar que un juez de cámara ratifique esa primera sentencia. Porque fue muy doloroso todo, primero fue dolorosa la muerte de Gastón, la forma en que lo mataron.
La gente, la sociedad en general, no piensa que a uno le puede llegar a pasar esto, y cuando te pasa vos pensas “bueno es tan obvio lo que pasó que un juez va a hacer justicia”, porque es parte del contrato social; hay un juez que interviene para mediar entre partes porque sino es la ley de la selva, ojo por ojo, diente por diente; vos me haces esto, yo te lo devuelvo. Cuando uno entra en el sistema es todo distinto a lo que uno piensa. Y te encontrás con que la justicia te toma el pelo como lo hizo el Tribunal Nº 5, después el Tribunal Nº4 y eso te hace peor, eso es un doble daño. El primer daño es la muerte de Gastón, el segundo es la sentencia del el Tribunal Nº 5, el tercero la sentencia del Tribunal Nº4 y también por parte del Ministerio de seguridad que los mantuvo en funciones hasta ahora. Aún cuando en la segunda sentencia dijeron que fueron negligentes. No sé lo que van a hacer ahora estando los tipos condenados.
Yo siempre esperaba el sentido común, que haya algún tipo de anulación de esa injusticia. Y que haya habido condena me pareció ejemplar porque los jueces vieron lo que vieron todos los peritos oficiales, lo que vieron los fiscales de instrucción como el Dr Bordenave que intervino en el primer juicio o el Panzoni en el segundo. O sea, toda la gente que trabajó con vocación de justicia vio lo que pasó, vio la forma en que mataron a Gastón, todos, menos los jueces de primera instancia. Entonces a nosotros nos da una gran satisfacción y nos da esperanza saber que puede haber justicia.
En esta lucha por conseguir una condena, que además es ejemplar, ¿con qué se han encontrado?
Hay otras familias que pasaron por situaciones como estas, algunas que ya han recorrido este camino y lograron una sentencia justa, como el caso de Raquel Wittis, ella nos ayudó muchísimo desde su lugar. Eso en cuanto a los que ya pasaron por esto, y hay quienes ahora lo están pasando como el caso de Gabriel Blanco que acompaña la APDH La Matanza. Ahí el tribunal que absolvió a los policías por Gastón también absolvió a policías en el juicio por Gabriel. Y cuando supe la sentencia me comuniqué con ellos para darles apoyo, para decirles que no todo está perdido que por más que los jueces de La Matanza hagan cualquier cosa en la cámara hay razonabilidad. Como para transmitirles la fuerza de que sigan adelante, de que se puede, se puede lograr justicia.
¿Cómo ves el escenario de la justicia ahora?
Mirá, desde el lugar de lo que es la causa de Gastón tenemos paz. Desde el lugar de familiares de otras víctimas, a cualquiera que le podamos dar una mano se la vamos a dar tal como nos la dieron a nosotros. Sobre todo en los dos juicios orales que fueron muy violentos, fueron una vergüenza, impresentables, horribles, los dos. Y los que nos sostuvieron a nosotros fueron familiares de otros casos que nos estuvieron acompañando, o sea los familiares de otras víctimas y gente de organizaciones como la APDH de La Matanza y la CPM. Ellos fueron los que nos ayudaron a que emocionalmente podamos pasar ese trance. Y si cualquiera de ellos me pidiera a mí que les de una mano cómo no se las voy a dar.