RAMOS MEJÍA La escuela de estética “Lucina Álvarez” teme perder el edificio
En el mes de diciembre se le vence el contrato de alquiler en el edificio. Los dueños quieren vender el inmueble pero desde el estado provincial no han informado si acordarían la compra para poder garantizar la continuidad de la escuela en el lugar. El miércoles 3 de diciembre se realizará un evento artístico-cultural en la calle para buscar apoyos de la comunidad.
ANDAR en La Matanza
(Emilio González Larrea) Es la única escuela de educación estética en La Matanza y fue la primera de su género en la provincia de Buenos Aires. Depende de la Dirección General de Cultura y Educación provincial, y en el mes de diciembre se le vence el contrato de alquiler en el edificio de Sargento Cabral 31 de la ciudad de Ramos Mejía, su ubicación actual. Los dueños quieren vender el inmueble y desde el estado provincial, no le han informado si acordarían la compra para poder garantizar la continuidad de la escuela en ese lugar.
Un poco de historia
Liliana Leiva, directora del establecimiento educativo, cuenta sobre los orígenes de la escuela: “Nace como una escuela experimental a partir de una propuesta que habían trabajado en la Primaria Nro. 23 de Ramos Mejía. A la cabeza de ese proyecto estaba Ema Calviño, una artista plástica fallecida, junto con maestras de Artística de esa institución que tenían la idea de que los chicos tuvieran talleres de plástica a contra turno. Entre esas docentes estaba Lucina Álvarez quien es una escritora, docente, desaparecida durante la dictadura militar, por lo cual nuestra escuela lleva su nombre a partir de 2012.
Los inicios fueron en el año 1969. En el año 1971 se decreta la creación de la escuela que se instaló en Las Heras 32, en una casa que habían donado unos vecinos de Ramos. Esta fue la primera escuela de educación estética en la Provincia, después de crearon dos en La Plata y una en Tablada que fue cerrada durante la dictadura militar, por eso la nuestra es la única escuela de educación estética en La Matanza. En el 2007 nos trasladamos a este edificio de Sargento Cabral 31”.
¿Qué va a pasar después de diciembre?
Nuestra entrevistada se muestra muy preocupada, ya que “la Dirección de Cultura y Educación de la provincia alquila el edificio, se vence el contrato de alquiler ahora en diciembre y los dueños lo quieren vender; le presentaron una propuesta al Estado provincial y tienen que acordar el precio entre ellos. Tememos por nuestra continuidad en este lugar, ya que en Ramos Mejía hay mucha especulación en el negocio inmobiliario – y los dueños que también son de un grupo económico- privilegien el negocio, no acuerden con el Estado en el precio y nos quieran sacar de aquí. Nosotros queremos quedarnos en este lugar, por un lado por la historia de la escuela y además estamos cómodos para desarrollar nuestras actividades. Entendemos que se debe privilegiar la educación pública artística y por eso queremos continuar en este edificio, que sea para la escuela definitivamente”.
El perfil de la escuela
Para ingresar a la Escuela de Educación Estética no se requiere determinada escolaridad, hay alumnos de 4 a 85 años. Es una escuela formal que depende de Educación Artística de la Provincia de Buenos Aires, pero no otorga títulos a los que pasan por ella, acredita la cursada, se imparten saberes y, como todas las escuelas similares de la Provincia, nacieron como extensión de la escuela común. Sí, extiende un certificado que le permite al que termina, seguir estudios en otras instituciones.
Los alumnos de la primaria cursan cuatro talleres básicos y obligatorios: literatura, música, plástica bidimensional y plástica tridimensional. También existen otras disciplinas: danza, teatro, clown, percusión, historieta, a elección y se pueden hacer en distintos horarios. La oferta es muy amplia, para los adolecentes y adultos, hay fotografía, cine de animación, artes gráficas, diseño de indumentaria y otros.
La comenta directora con orgullo: “algo particular de esta escuela que no tienen otras de la provincia, son los talleres de extensión cultural de adultos; grupos que se forman acá y salen a realizar actividades de expresión artística gratuita en otros lugares, como una propuesta de la escuela para que el arte cumpla una función social. Se forman en los géneros de clown, ensamble musical, narración, percusión y teatro. Otra característica de esta escuela, es que la abrimos a otros artistas para interactuar con ellos, como ocurrió recientemente que tuvimos al grupo de teatro comunitario Desparramos, presentando una obra”.
“Contamos con una biblioteca de artística muy importante que es de uso interno. Desde el punto de vista edilicio, tenemos una buena estructura que satisface nuestras necesidades, hay dos pisos con un monta cargas para el piso superior, existen distintas aulas donde pueden rotar los alumnos, no hay aulas para cada curso. Contamos con laboratorio de fotografía, sala de informática, sala de instrumentos musicales, hornos eléctricos para el horneado de la arcilla, lugar de acopio para la arcilla que compramos en cantidad, patio externo con escenario y también un piano de cola. Si bien desde ahora hasta el mes de marzo estamos en período de inscripción, también inscribimos durante todo el año en la medida que se van armando cursos y hay horas de profesores disponibles. Tenemos un plantel docente de 50 profesores que toman los cargos en acto público como cualquier docente, o en concurso interno en la escuela, y una matrícula de 600 alumnos en tres turnos, mañana, tarde y vespertino”.
Festival el 3 de diciembre.
Liliana remata diciendo que “esta lucha no es solo de la escuela, en ese sentido, estamos en una campaña de hacer visible esta problemática en la comunidad para lo cual estamos juntando firmas de adhesión a nuestro reclamo, difusión en los medios locales y nacionales y otras acciones como realizar espectáculos artísticos en nuestra sede. El miércoles 3 de diciembre vamos a hacer un evento artístico-cultural en la calle, frente a la escuela, entre las 18 y 22 hs, al cual invitamos a la comunidad ramense y a quienes quieran apoyar a la única escuela pública de educación estética de La Matanza”.
Lucina Álvarez
Lucina Álvarez era poeta, escritora, docente y una militante popular. Ella y su esposo Oscar Barros fueron secuestrados por un grupo de tareas de la dictadura militar el 7 de mayo de 1976, y desde entonces se encuentran desaparecidos. Se desempeñaba como redactora de la revista «Barrilete» donde su compañero Oscar Barros era uno de los editores. Esta revista fue fundada por un grupo de poetas, entre los que se encontraba Roberto Santoro, quien también fue secuestrado y desaparecido por la dictadura militar el 1 de junio de 1977. Entre sus amistades también se encontraba Haroldo Conti. El día en que desapareció, la estaban esperando en la escuela para realizar una muestra artística con los chicos.
Cuando en el 2012 se impuso su nombre a la escuela, continua Liliana, “se realizó un acto muy emotivo del cual participó su hermano, quien viajó desde el sur y ayudó a terminar el mural que está en el frente de la escuela con el nombre de Lucina, también estuvieron compañeras suyas de aquel momento. Para nosotros fue un acto de reparación histórica, el rescatar su memoria y romper el silencio impuesto durante muchos años sobre su persona”.