ARTE POR LA MEMORIA La CPM ofrece muestras itinerantes por el 24 de marzo
Al cumplirse 40 años del Golpe de Estado, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) pone a disposición de escuelas, centros culturales y organizaciones sociales más de una decena de muestras itinerantes para recordar y pensar nuestro pasado reciente a través del arte. Este acervo documental forma parte del patrimonio cultural del Museo de Arte y Memoria de la CPM y las instituciones interesadas pueden gestionar el préstamo comunicándose al correo museo@comisionporlamemoria.org o al teléfono (0221) 483-5590.
ANDAR en las memorias
(Agencia/ CPM) El arte como registro histórico y vehículo de la memoria. El fin estético y el fin político. El compromiso con la promoción y la defensa de los derechos humanos. Con la premisa de llevar las obras de reconocidos artistas y de un gran valor documental e histórico a cada rincón de la provincia, la Comisión Provincial por la Memoria ofrece una variada cantidad de muestras itinerantes para conmemorar el 24 de marzo y recuperar el sentido político y pedagógico de la memoria.
Los libros de Héctor Germán Oesterheld, las canciones de Mercedes Sosa, Alfredo Zitarrosa u Horacio Guarany, escritos y fotos personales de Haroldo Conti, las fotografías familiares de detenidos y desaparecidos, el recuerdo de sus hijos. Y también la reparación histórica, la lucha por verdad y justicia. Los documentos de la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (DIPPBA) y los ensayos fotográficos de artistas comprometidos con los derechos humanos: Diana Dowek, Alfredo Srur, Lucila Quieto, entre otros. Distintas sensibilidades, criterios y registros, y el mismo sentido político: un arte por la memoria.
Las muestras itinerantes son una posibilidad de trasladar estas obras y documentos a nuestras ciudades, escuelas y barrios. Una propuesta cultural y pedagógica para repensar, desde la riqueza y diversidad estética que nos ofrece el arte, nuestra historia.
Entre las muestras disponibles para su préstamo se encuentran: Paisajes de la memoria, una muestra colectiva de fotografías que muestra las marcas urbanas y espacios comunes de recodación; Imágenes robadas, imágenes recuperadas, es un archivo de fotos tomadas por agentes de la DIPPBA, fotos que marcan y señalan a las víctimas y que, ahora, son recuperadas y resignificadas como memoria política y colectiva de los hombres y mujeres perseguidos por el terrorismo de Estado; Represión en la cultura, una propuesta visual que logra poner en conocimiento la pedagogía del censor sobre libros y cantantes prohibidos en la última dictadura militar; Nexo, el testimonio fotográfico de Marcelo Brodsky que propone indagar las relaciones entre la experiencia personal del genocidio y la de la sociedad; Como un león, compuesta por fotos, escritos literarios y periodísticos de Haroldo Conti que marcan el legado aún intacto del escritor desaparecido; Arqueología de la ausencia, fotografías intervenidas por Lucila Quieto como una forma de que, a través de la técnica, los hijos se reencuentren con sus padres desaparecidos en una imagen; Cruces, idas y vueltas de Malvinas, compuesta de fotos inéditas sacadas por los mismos soldados argentinos y británicos durante la guerra; El devotazo, retratos de los momentos previos a la liberación de los presos políticos; En negro y blanco, una mirada sobre el período de la historia nacional que va desde el Cordobazo hasta el Juicio a las Juntas; La aventura continúa, se exponen los libros de Oesterheld y la lucha por verdad y justicia como una continuidad de sus propia lucha; Nueve bocetos, recupera los proyectos de distintos artistas presentados en el concurso para construir un mural en memoria de los desaparecidos de La Bancaria.
Junto a estas exposiciones que tienen como elemento central la reconstrucción histórica del genocidio, también se proponen otras dos muestras representativas de las violencias y deudas pendientes en materia de derechos humanos en la actualidad: Nosotros por López, refleja algunos de las manifestaciones públicas en reclamo de la aparición de Jorge Julio López, y Heridas, registro de los barrios periféricos de Buenos Aires y el relato de vidas que transcurren entre la carencia económica y rodeados generalmente por la falta de acceso a la salud y la educación.
El próximo 24 de marzo se cumplen 40 años del último golpe militar, el aniversario es una oportunidad para pensar críticamente su significado histórico y político, y la lucha por la promoción y defensa de los derechos humanos en la actualidad. Desde su creación, la CPM ha aportado a la construcción de una política de memoria que permita recuperar su sentido pedagógico: recordamos para construir el futuro. Ese sentido de la memoria atraviesa cada una de las muestras itinerantes que se ofrecen para esta nueva recordación del genocidio argentino.