LA SOMBRA DE LA INTELIGENCIA SOBRE LA MILITANCIA ESTUDIANTIL La CPM entregó documentos de la DIPPBA al Centro de Estudiantes de Medicina
En un acto homenaje por los detenidos desaparecidos de la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de la Plata, la Comisión Provincial por la Memoria entregó documentos de la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (DIPPBA) que dan cuenta de la persecución, espionaje y vigilancia al Centro de Estudiantes de Medicina en los años previos al Golpe de Estado de 1976. Los archivos que componen el informe permiten no sólo reconstruir la historia de los compañeros desaparecidos de la facultad sino también el compromiso y la lucha de la militancia estudiantil por la educación y la salud pública
ANDAR en la memoria
(Agencia) El presidente de la CPM, Víctor Mendibil, hizo entrega de los documentos de inteligencia que la DIPPBA elaboró sobre las actividades y autoridades del Centro de Estudiantes de Medicina (CEM) entre 1954 y 1990. Bajo la carátula “Centro de Estudiantes de Medicina”, agrupado en la mesa “A”, factor estudiantil, el informe reúne legajos que permiten identificar la sistemática vigilancia y persecución sobre uno de los actores más reprimidos durante la última dictadura militar: el movimiento estudiantil. Del acto también participó Ana Barletta, miembro de la CPM y vicepresidenta de la UNLP.
“El homenaje que organizó el CEM fue un acto muy trascendente en el que se recordó a los compañeros desaparecidos. Fue una jornada que compartieron los estudiantes de hoy, los actuales integrantes del Centro, distintas agrupaciones politicas de la Facultad, egresados de Medicina, titulares de cátedra y representantes de la Universidad”, destacó Mendibil.
Asimismo, señaló que en todas las intervenciones se puso en valor el aporte documental de la Comisión Provincial por la Memoria por el material desconocido que se entregó y que contiene las acciones de inteligencia y persecución contra el movimiento estudiantil desplegado por los organismos de seguridad durante casi 40 años: “Fue un reconocimiento a la tarea de sistematización de los archivos de la DIPPBA que nos permite pensar el ayer, movilizarnos hoy y construir un futuro distinto respecto a aquellas políticas de persecución y violencia del Estado contra la militancia estudiantil”.
Los documentos fueron recibidos por los integrantes actuales del CEM en el marco de un acto homenaje por los detenidos desaparecidos de la facultad de Ciencias Médicas de la UNLP y en conmemoración del 39º aniversario de la desaparición de Luis Vicente Di Mattia. En junio de 1977, Di Mattia —por ese entonces, presidente del CEM— fue secuestrado, junto a tres compañeros, por una patota militar en el departamento donde vivían.
La Facultad de Medicina tiene 174 compañeros detenidos desaparecidos y es una de las unidades académicas que sufrió con mayor intensidad el avance militar desatado tras el Golpe de Estado de 1976. “La magnitud de la represión marca, de alguna manera, la fuerte resistencia a la dictadura y también el nivel de participación del centro de estudiantes en la defensa de la educación y la salud pública”, expresó Santiago, actual integrante del CEM.
El informe elaborado por la CPM contiene legajos de inteligencia que dan cuenta de la vigilancia sobre el CEM durante más de 40 años. Entre el material, se encuentran volantes con las proclamas de las distintas agrupaciones, informes de las asambleas y las elecciones estudiantiles, y el control sobre las actividades que se desarrollaban desde el centro de estudiantes. Además, se detallan los datos biográficos y antecedentes de los estudiantes que militaban en los distintos espacios, muchos de ellos forman parte de la nómina de detenidos desaparecidos.
“Estos archivos demuestran que hubo investigación previa al Golpe como parte de un plan sistemático de persecución a los militantes populares. La recuperación de estos documentos es un acto de memoria reparatoria para cada uno de los compañeros desaparecidos y es también una forma de reconstruir la historia de nuestra facultad”, expresaron desde el CEM.
En ese sentido, los documentos que integran el informe permiten identificar líneas de acción política, discusiones hacia el seno de la universidad y las miradas sobre la educación y la salud. “El contenido de estos legajos nos atraviesa de lleno como estudiantes, nos muestra la continuidad de algunas luchas que tienen plena vigencia como el arancelamiento de la universidad, el ingreso eliminatorio, los desafíos de la organización como movimiento estudiantil y el compromiso en la defensa de los derechos humanos”, cerró Santiago.
Con cada nueva entrega y publicación de material de la DIPPBA, la CPM reafirma su política de gestión y puesta en valor de este acervo documental con el objetivo de promover su publicidad para la promoción y fortalecimiento de las políticas de memoria como parte de la agenda en derechos humanos.