DERECHOS HUMANOS La CPM cumplió 15 años
ANDAR en la provincia
(CPM/ Agencia) El 8 de julio de 1999, por una resolución de la Presidencia de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, se creaba la Comisión Provincial por la Memoria.
El conjunto de referentes de un amplio campo de acción en defensa de los derechos humanos, que respondieron a la convocatoria, dieron inicio a un camino que aún continúa.
A lo largo de estos años muchos otros referentes se han sumado al desafío de construir un organismo público, autónomo, que lucha por los derechos humanos, que trabaja por la memoria y se compromete con cada presente que transitamos a favor de los más vulnerables y de una sociedad más justa, humana y democrática.
Hoy la CPM es un organismo cuya creación y autonomía han sido consagradas por una ley provincial. Entre otras actividades, gestiona el Archivo de la DIPPBA, lleva adelante el Programa Jóvenes y memoria, ha creado el Museo de Arte y Memoria y el Comité contra la Tortura.
Más de cien trabajadores se comprometen día a día con los programas que llevan adelante y que tienen una incidencia directa en la vida de miles de personas.
Estamos honrados de ser la institución que somos, y somos conscientes del camino que aún queda por recorrer.
Agradecemos a todos los que a lo largo de estos años han contribuido a hacer la CPM desde sus organizaciones, desde la escuela, desde la cárcel, desde el barrio, desde los municipios, desde las universidades, acompañándonos en cada uno de nuestros desafíos.
Desde ANDAR nos sumamos a esta celebración y compartimos la reflexión de algunos de sus integrantes:
Víctor Mendibil (vicepresidente): 15 años por más democracia. Por profundizar este sistema democrático surgido después de la noche negra de la dictadura militar. 15 años enfrentando malos tratos ejercidos por las fuerzas de seguridad como práctica sistemática. [pullquote]15 años luchando para que no se descalifique la palabra de las víctimas[/pullquote] 15 años luchando para vencer la desinformación. 15 años luchando para que no se descalifique la palabra de las víctimas. 15 años de apertura y aporte desde los archivos a los juicios por la verdad y a los juicios por crímenes de lesa humanidad, aquí en nuestro país y en la región, Plan Cóndor de por medio. 15 años luchando por una justicia democrática, especialmente en el marco de la selección de los magistrados. 15 años por construir junto con los jóvenes espacios de elaboración y de transmisión generacional de memoria colectiva. 15 años en la lucha por detener el padecimiento de los pobres en las cárceles bonaerenses. 15 años alentando a todas las expresiones de la cultura comprometidas con la vida, las luchas del pueblo y especialmente el sufrimiento de los trabajadores, desde el Museo de la CPM y desde las muestras itinerantes. Hoy honramos a los que compartieron con nosotros y que ya no están. Y también reconocemos el trabajo de todos los equipos técnicos que integran la CPM y los que han integrado, como miembros de la Comisión en diversas etapas, poniendo lo mejor de sí en esta batalla.
Mauricio Tenembaum (secretario): la CPM es un fruto maduro de la democracia en nuestro país. La Provincia de Buenos Aires no era, precisamente, un lugar en el que tuviéramos organismos importantes descentralizados, hasta que una decisión prácticamente unánime de las dos cámaras entendió que debía existir un organismo que se preocupara por la memoria, la búsqueda de la verdad y la justicia. Para ello convocó a un grupo bastante heterogéneo de personas del ámbito de los derechos humanos, dirigentes obreros y miembros de comunidades religiosas. Esto fue inmediatamente bien recibido por la sociedad. Debemos reconocer el carácter público que tuvo desde el inicio la CPM, con personas comprometidas con la idea de construir algo cuyo destino no íbamos a conocer. El apoyo que tuvimos derivó en que nos incorporaran a la ley de presupuesto de la Provincia y que lográramos ser entendido como un organismo autónomo y autárquico, con el derecho a disentir ante políticas oficiales en materia de derechos humanos y fundamentalmente el camino que fuimos tomando fue descubrir el drama que significa la vida de los internos en las cárceles de la Provincia de Buenos Aires. [pullquote]personas comprometidas con la idea de construir algo cuyo destino no íbamos a conocer[/pullquote] A eso se fue agregando el interés de la Provincia por lograr que tuviéramos una casa propia: por 99 años no entregaron el edificio de la calle 54, hecho protocolizado y que consta en actas con la presencia de la justicia. Al mismo, tiempo, la relación con la Cámara Federal, que había desarrollado una intensa actividad a través de los juicios por la verdad que se estaban realizando, y que nos hizo parte de sus actas y que culminó con la entrega, por parte del estado provincial, de los archivos de la exDIPPBA. Durante todos estos años, la independencia y el carácter plural de la Comisión fue un objetivo fundamental de sus miembros y se ha ido extendiendo, ampliando, hasta ser reconocida en el orden nacional e internacional en materia de políticas educativas sobre derechos humanos. Así es el caso del Programa de Jóvenes y Memoria, un proyecto que ha interesado a escuelas de toda la Provincia. La característica distintiva de nuestro organismo es que, además de colaborar con la justicia con la entrega de archivos de DIPPBA y de colaborar con los investigadores de la tragedia de la última dictadura, es que se ha contribuido también al conocimiento, discusión y reflexión de los principales problemas que tiene la sociedad bonaerense en la actualidad. Como dije al comienzo, la CPM es un fruto maravilloso del funcionamiento del sistema democrático en la Provincia.
Elisa Carca (tesorera): La experiencia de estos 15 años de la CPM ha sido una de las más importantes de mi vida social y política. Es un espacio que tiene la maravilla de la pluralidad y el respeto entre todos sus miembros. Nos enfrenta todos los días con desafíos distintos, desafíos profundos, desafíos que tienen que ver con el respeto por la persona, por los derechos. [pullquote] desafíos distintos, desafíos profundos, desafíos que tienen que ver con el respeto por la persona[/pullquote] Es un espacio que no se detuvo sólo a investigar, juzgar, aportar elementos a las causas de lesa humanidad por los horrores cometidos en la última dictadura, sino que tiene una mirada muy fina, profunda, atenta para saber cuáles son los derechos humanos que se vulneran hoy y para que el día de mañana no deban existir nuevas ‘comisiones por la memoria’ mirando dónde estábamos nosotros que no veíamos lo que estaba pasando. Lamentablemente todavía hoy se siguen violando derechos humanos en nuestro país. Como decía, la CPM es un ámbito plural, maravilloso, donde a veces tenemos diferencias pero por encima de ellas objetivos comunes muy claros que hacen que las diferencias se diluyan en el respeto y en el compromiso que cada uno de nosotros pone todos los días.
Roberto Cipriano García (prosecretario): este cumpleaños de la CPM es una buena excusa para repasar el aporte que este organismo público, atípico en su diseño y organización, ha dejado por la lucha de los derechos humanos en Argentina. En cuanto a la Comisión en si, lo primero que destaco como importante, es la autonomía político funcional que ha mantenido con relación a los poderes del estado. Desde su fundación la Comisión no sólo trabajó y abrió a la sociedad los archivos de inteligencia de la policía bonaerense, también denunció e hizo visibles las graves violaciones de derechos humanos del presente. Estas denuncias serias y rigurosas, le valieron casi permanentemente el enojo e irritación de los funcionarios de turno o bien ajustes presupuestarios tendientes a quitarle posibilidades de accionar. Lo segundo es el pluralismo de ideas que se ha sostenido en su composición y también en su accionar. [pullquote]el pluralismo de ideas que se ha sostenido en su composición y también en su accionar [/pullquote]La integración con personas provenientes de distintas luchas y organismos de derechos humanos le dieron una composición valiosa que le permitió enfrentas las peleas que se han dado por la vigencia de los derechos humanos, por memoria, verdad y justicia. Como tercer elemento menciono un colectivo de trabajadores comprometidos con la institución y los derechos humanos.
En cuanto al trabajo de la Comisión hacia afuera, se ha desplegado una enorme tarea que integra a distintos sectores de la sociedad. Desde los miles de jóvenes que se sumaron a Jóvenes y Memoria hasta los miles de detenidos y familiares asistidos por el Comité contra la Tortura. Desde los cientos de familiares y afectados por el terrorismo de estado que han encontrado en el Archivo de la ex DIPBA respuestas a sus historias hasta las expresiones artísticas expresadas de manera plural en el Museo de Arte y Memoria. Desde distintas actividades y programas, la CPM ha impactado de manera directa en la sociedad bonaerense, proyectándose hacia el resto de Argentina.
La experiencia de monitoreo o control de lugares de encierro construida desde la mirada de las víctimas, con un desarrollo metodológico original y centrado en entrevistas desarrolladas en las celdas o lugares de alojamiento con los detenidos, los informes anuales sobre violaciones a los derechos humanos del presente de parte de fuerzas de seguridad y penitenciarias, los programas educativos novedosos en cuanto a pedagogía de la memoria, con encuentros de jóvenes en Chapadmalal intercambiando sus investigaciones y producciones comprometidas no sólo con el pasado sino también con el presente, la capacidad de integrar las expresiones artísticas con la lucha por los derechos, todas estas tareas se pudieron pensar y desarrollar porque la institución adoptó -desde un posicionamiento político y ético respetuoso de los derechos humanos-, políticas activas destinadas a transformar la realidad, profundizando la democracia y construyendo una sociedad más igualitaria.
Sandra Raggio (directora general de áreas): que la Comisión cumpla 15 años es el resultado de un conjunto de acciones que los integrantes de la institución fueron desplegando a lo largo de los años y que permitió ir consolidándose en la Provincia de Buenos Aires como una clara referencia en materia de justicia, derechos humanos y políticas de memoria, incluso en un tiempo en el que todavía esas temáticas, desde los ámbitos estatales, no tenían la fuerza que fueron adquiriendo en años posteriores. [pullquote] una clara referencia en materia de justicia, derechos humanos y políticas de memoria [/pullquote] Entonces, para muchos de nosotros, la CPM fue una institución que fue abriendo caminos, inventando formas de intervención, creando programas, ideando y diseñando modalidades de acción en el territorio y con las organizaciones, promoviendo siempre el trabajo en red y las dinámicas desde abajo hacia arriba, sabiendo que los derechos humanos implican políticas estatales y el fortalecimiento de los actores sociales en la lucha por los nuevos derechos. Esa fue una política constante de la CPM y fue una decisión estratégica. Para la CPM la memoria no es pasado, siempre es una acción sobre el presente, y la lucha por reivindicar a los desaparecidos, víctimas por los crímenes de lesa humanidad, tienen un correlato ineludible con el presente y con la vulneración de los derechos humanos hoy. Esta posición es un núcleo sustantivo de la CPM, que la ha identificado ante otros organismos públicos y organizaciones sociales. Su autonomía y su capacidad de entender que la memoria es una intervención sobre el presente y sobre los nuevos horizontes y perspectivas sobre el futuro.