GONZALO BUGATTO VALORÓ QUE SE HAYA CAIDO LA ESTRATEGIA DE LA DEFENSA “La condena del expolicía Benítez demuestra que cometió un asesinato”
El miércoles 17, en Lomas de Zamora, el TOC 10 condenó a Benítez a 14 años de prisión con orden de detención inmediata por el asesinato de Lautaro Bugatto, cometido en 2012. Luego de la sentencia, su hermano Gonzalo señala que, más allá del monto de la pena, es importante que se haya revertido y superado el intento de criminalización de Lautaro realizado por el imputado durante el juicio.
ANDAR en los juicios
(Agencia) “El momento de la lectura de la condena fue en un punto aliviador para nuestra familia porque esa condena era el objetivo que buscábamos: que mi hermano pudiera descansar en paz, más aún cuando tuvimos que escuchar la estrategia de la defensa que en todo momento intentó criminalizar a mi hermano acusándolo de intento de robo y enfrentamiento”, afirma Gonzalo Bugatto, hermano del joven de 20 años, jugador de la inferiores de Banfield, que en la madrugada del 6 de mayo de 2012 recibió un impacto de bala por la espalda que en minutos le causó la muerte. El imputado, el expolicía Davíd Benítez, fue condenado la semana pasada a 14 años de prisión con detención inmediata.
“El proceso judicial no termina con este juicio, por eso es importante que se haya llegado a demostrar judicialmente que Benítez cometió un asesinato y que fue condenado en un marco probatorio”, agrega Gonzalo en diálogo con ANDAR.
Cabe recordar que el juicio contra Benítez comenzó en agosto y, durante el desarrollo de las audiencias, testimoniaron varios peritos criminológicos que desbarataron la versión de la defensa acerca del presunto enfrentamiento –por intercambio de disparos- entre el expolicía y el joven asesinado. Asimismo, se advirtieron relatos contradictorios entre los testigos ofrecidos por los abogados de Benítez.
En realidad, desde el comienzo de la causa por el asesinato de Lautaro Bugatto se produjeron diversas irregularidades –especialmente manipulación de pruebas como el vehículo en el que se trasladaba el imputado antes de que efectuara los siete disparos- que fueron desmontándose en las audiencias del juicio.
Por otra parte, en cuanto a la calificación legal del delito, en un momento la causa estuvo a punto de ser elevada a juicio por “exceso en legítima defensa”, aunque finalmente llegó como “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego”, figura delictual por la que el expolicía fue condenado.
La misma Cámara de Apelaciones deberá resolver la situación una vez que la defensa de Benítez apele la condena. En este sentido, Gonzalo Bugatto afirma que “vamos a seguir manteniendo nuestra postura firme, de que queremos que siga detenido y que, de mínima, se ratifique esta sentencia del tribunal. Si nosotros no apeláramos esta condena, estaríamos dando conformidad, tanto a lo que ya se determinó por parte del TOC 10 como a lo que pueda pedir la defensa de Benítez”.
“Si mañana hay un fallo que cambia esta situación, diremos entonces que no habremos conseguido justicia. Por eso, ahora hay que pelearla para seguir sosteniendo esta condena”, agrega. El hermano de la víctima también afirma que en todo momento su familia se sintió acompañada por amigos de Lautaro, vecinos, referentes de organismos de derechos humanos, militantes, y compañeros y profesores del Club Atlético Banfield, donde el joven integraba las divisiones inferiores.
“Nunca nos sentimos solos. Todos los compañeros expresaron su dolor y acompañamiento, tanto como lo necesitábamos nosotros. Es muy importante sentirse acompañado, sentir que lo que uno hace no es en vano, porque hay una sociedad argentina que también deseaba esto. Cuando he estado con jóvenes en las escuelas, la mayoría se ha expresado de esta manera, y para nosotros ha sido vital todo el acompañamiento recibido”, dice Gonzalo, quien también destaca las invitaciones por parte del Programa Jóvenes y Memoria, de la CPM, para conversar con los jóvenes de secundaria, “algo que fue muy importante para nuestra lucha”.