A DIEZ AÑOS DE SU SEGUNDA DESAPARICIÓN, LA CPM INAUGURA LA MUESTRA TESTIGO Jorge Julio López: la memoria del hombre que luchó contra la impunidad
Bajo la consigna “A 10 años seguimos buscando. Hoy Etchecolatz sabe dónde está”, la Comisión Provincial por la Memoria desarrolla una serie de actividades para recordar la segunda desaparición de Jorge Julio López y mantener vigente su presencia en la lucha por memoria, verdad y justicia. En ese marco, el próximo viernes a las 19 horas se inaugura en el Museo de Arte y Memoria (calle 9 Nº 984, La Plata) la muestra Testigo de Jorge Caterbetti, con la participación de Rubén López, hijo de Julio. El organismo también realiza una campaña de afiches en toda la provincia y acompaña el proyecto de Gerardo Dell Oro “A pegar por López”.
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(CPM/Agencia) “Pastor: te dejo esta carta para ver si algún día podés hacer justicia”, escribió Jorge Julio López como nota que acompaña los escritos que le envió a su compañero de militancia Jorge Pastor Asuaje. Tras la segunda desaparición de López, Pastor lo presentó ante los tribunales y fue parte de la prueba que permitieron condenar al genocida Miguel Etchecolatz. Esos mismos escritos forman ahora la muestra Testigo del artista conceptual Jorge Caterbetti.
En esos papeles cubiertos de palabras, de dibujos, de diagramas, está Jorge Julio López, el hombre que sobrevivió al terrorismo de Estado, que declaró para condenar a los responsables del genocidio y que nos legó su memoria inmensa, íntegra, para seguir luchando contra la impunidad.
“Mi viejo escribía todo porque quería tener la certeza de ser fiel a su memoria. Y hoy esos papeles son un legado que nos transfirió para seguir militando por la verdad y la justicia como lo hizo él”, cuenta Rubén López. Y agrega: “Después de 10 años de impunidad, tenemos que salir militar por mi papá que no está y también para que el genocida preso gracias a su testimonio no sea liberado”.
En 2006, el testimonio de Jorge Julio López fue decisivo para condenar a prisión perpetua al represor Miguel Etchecolatz en el primer juicio que reconoció la existencia de un plan genocida en Argentina. Sin embargo, recientemente, el Tribunal Oral Federal Nº 1 de La Plata le concedió a Etchecolatz el arresto domiciliario; si bien la medida todavía no se efectivizó, una secuencia de decisiones judiciales del mismo tenor podrían culminar con su concesión.
Para el realizador Jorge Caterbetti, los aniversarios generan una potencia de memoria y “ante un escenario que parece cada vez más complicado, tenemos que aunar esfuerzos para mantener vigente la memoria de López”. Con ese objetivo, el viernes se inaugura la exhibición desplegada Jorge Julio López. Los demonios sin cuernos desplegada en tres puntos distintos de la ciudad: el salón de los pasos perdidos del Palacio de la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires, el hall central del Museo de Arte Contemporáneo (MACLA) y el Museo de Arte y Memoria (MAM) de la CPM.
“López empieza a escribir en el 98, y hasta su desaparición no deja nunca de escribir. Escribe sobre cualquier papel. Relata su detención en 1976, su paso por la comisaría 5ª, las torturas que sufre en el Pozo de Arana. Estos escritos son el Diario de Ana Frank del genocidio argentino”, dice Caterbetti sobre Testigo, la muestra que se inaugura el viernes en el MAM. Caterbetti también dice que “estos escritos son López. Su letra, su cotidianidad, sus herramientas de albañil, sus ropas”. Y define esta muestra con un oximoron: “la ausencia presente”.
“Presentar esta muestra en la Comisión es una forma de canalizar mi dolor y de permitir que estos escritos sigan llegando a la gente, sigan activando la memoria contra la impunidad”, explica Rubén López. A diez años de la segunda desaparición de Jorge Julio López, la CPM invita al público en general a participar de la inauguración que se realiza el próximo viernes a las 19 horas en el Museo de Arte y Memoria, calle 9 Nº 984.