ENCUENTRO DE LENGUAS INDÍGENAS Idiomas originarios: una bandera a levantar
El Encuentro de Lenguas Indígenas en la Comunidad Pluriétnica de Punta Querandí contó con una gran participación de hablantes de diversos idiomas de los Pueblos Originarios en Tigre, Escobar, San Fernando y otros municipios de la región. “Hoy se construyó de abajo hacia arriba las demandas que tenemos en la base para que se eleven a las autoridades”, señalaron protagonistas de la jornada.
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(Punta Querandí) El encuentro se llevó a cabo el 24 de noviembre y quienes participaron pensaron colectivamente algunas propuestas concretas para reclamar a los Gobiernos la protección y promoción de las lenguas indígenas, tal como establece la Constitución Nacional y Tratados Internacionales como el Convenio 169 de la OIT. “Esto que tiene que ser como un parlamento de lenguas indígenas, tenemos que reclamar propuestas concretas a los gobiernos”, planteó el artesano qom Amancio Rojas, vecino de la localidad tigrense de Ricardo Rojas.
Uno de los expositores fue Roberto Díaz, artesano y hablante del idioma wichí, de la comunidad Misión Chaqueña de Salta y vecino de San Fernando desde hace décadas: “La agenda indígena es el momento que el Municipio la tiene que tener en cuenta. Los pueblos originarios tienen que estar en la agenda municipal y en la agenda nacional”. Otro valioso aporte fue el Cintya Quispe, militante de raíces kollas de la Organización Peronismo 26 de Julio, quien integra el Frente de Huertas Agroecológicas y trabaja en el Concejo Deliberante junto al legislador Javier Parbst (Frente de Todxs). “Hoy se construyó de abajo hacia arriba las demandas que tenemos en la base para que se eleven a las autoridades. Hay que ir tomándolo como bandera hasta que sea una política pública, es muy necesario”, expresó Quispe.
Una de las alternativas planteadas fue la de impulsar el reconocimiento de los idiomas originarios a través del Concejo Deliberante, siguiendo el ejemplo de la lucha en defensa de los humedales continentales. “La idea predominante fue la de plantear que los derechos lingüísticos y culturales de los pueblos originarios se cumplan”, aportó Verónica Gómez, profesora de lengua guaraní y vecina de la zona sur del conurbano. “El encuentro fue muy productivo porque entre todos pudimos pensar en propuestas que surgieron después de escuchar los testimonios de cada uno de los participantes”, agregó.
Idiomas reprimidos durante generaciones
La palabra fue circulando con un punto en común: “Las historias coincidían en lo mismo: nuestrxs padres, madres nos querían ‘proteger’ al no transmitirnos la lengua materna, por miedo a que sufriéramos discriminación”, señaló Cintia Lopez, cacica de la comunidad Hermanos Qompi de Garín (Escobar), quien viene habitualmente a las actividades de Punta Querandí, pero era la primera vez que lo hacía acompañada por su madre. “Estoy contenta de que mi mamá haya participado el domingo y que haya conocido Punta Querandí, es un fortalecimiento entre hermanxs”, expresó Cintia, y agregó: “Fue fuerte y doloroso escucharla, que en la escuela los docentes la golpeaban por hablar su lengua. Ella nunca perdió su idioma, siempre continuó”. “Por resistir, por luchar, por no callar debemos recuperar, para quienes no la hablamos, nuestro idioma, porque es nuestra identidad!”, exclamó Cintia.
En esta comunidad, su mamá, Mirta Romualdo, es la responsable de transmitir el idioma, pero necesitan de un acompañamiento desde las autoridades, hasta ahora inexistente. “La reunión estuvo muy buena, escuché testimonios que valía la pena escuchar, experiencias, había profesores, maestros, estuvo muy lindo”, expresó Mirta Romualdo. Uno de los objetivos de la comunidad es generar un taller o espacio regular de enseñanza de su idioma para sus integrantes: “Esperemos que se logre, eso es lo que queremos”, dijo Mirta. Y sobre este espacio de coordinación entre comunidades de la región, pidió “que sea pronto la próxima reunión”.
Verónica Gómez destacó la experiencia de la abuela de la comunidad Hermanos Qompi: “Personalmente, la historia de Mirta me conmovió porque en ella pude ver la verdadera necesidad de transmitir su lengua y su cultura, la necesidad de la comunidad de no perder su identidad cultural”.
“He visto también que es imperativo que el Estado actúe, que empiece de una vez por todas, que ya no puede ser que nuestras lenguas y culturas originarias sigan siendo subestimadas y que los que más sufran las consecuencias sean los niños, quienes terminan avergonzándose de su pertenencia a determinada cultura y hasta negándola”, relató la profesora. “La experiencia que contó Ramón Villar respecto del cambio que experimentan los chicos en la escuela al igualar en importancia sus idiomas al castellano, me hizo recordar mi propia experiencia de niña cuando la gente se refería al idioma guaraní como un dialecto, dándole un status inferior”, expresó Verónica Gómez.
Emociones fuertes
Roberto Díaz destacó que muchas personas se quiebran al hablar en este tipo de actividades y dio su interpretación: “Creo que todos se están emocionando cada vez que se encuentran en Punta Querandí porque se sienten tocados; venían buscando de hace rato cómo encontrarse, cómo participar. Se emocionan porque se sienten muy acompañados, muy protegidos ancestralmente y culturalmente. Una persona que se emociona es porque una cosita le tocó de adentro recordando a sus ancestros y eso para mí es un alegrón”.
En similar sentido, Cintya Quispe (Peronismo 26 de Julio) señaló: “Fue muy movilizador, siempre agradecida con las invitaciones sobre todo en esta etapa de que vengo trabajando un montón de cosas internas de mi pasado”. “Cuando escuchaba las experiencias, de la nada se me cruzó en la cabeza que mi vieja hablaba quechua; tiene que ver con la palabra, con un sonido, eso es lo que a veces nos hace sentir las cosas, calar más profundo de lo que nosotros a veces lo vivimos en lo cotidiano”, relató la compañera. “Muchos y muchas renegamos de nuestro pasado, pero por la sociedad, porque te enseñan que lo blanco es lo bueno. Todo lo que está por fuera de eso queda mal visto”, concluyó Quispe.
Entre los presentes, además de los miembros de las comunidades y descendientes de hablantes de idiomas indígenas, había varios adherentes a la causa originaria, entre ellos, el cura de nuestra localidad, Mario Lago, de la Parroquia Salvador del Delta. “Es importantísimo que el Municipio de Tigre y otros del conurbano, así como el Estado provincial, hagan realidad a través de políticas concretas el derecho de hablar y aprender las lenguas indígenas. Apoyo totalmente la propuesta”, manifestó el representante católico.
Muchas voces
También dieron su testimonio Darío Juárez y Ramón Villar Brizuela, miembros de la Comunidad Urbana Guaraní “Mbo’ehára Jasy Rendy” con sede en José C. Paz; Mónica Santos, vecina isleña de raíces guaraníes, Liset Fernández, nieta del fallecido cacique qom Eugenio Fernández y hermana de Micaela Fernández, víctima de femicidio; William Chalco Lia joven quechua-aymara del Partido de La Matanza; el mocoví Juan Navarro de la ciudad de Berisso; y Mirna Doldan Rodriguez (de familia hablante de guaraní).
Además acompañaron la jornada compañeros y compañeras comprometidos con nuestras luchas, como la comunicadora Mónica Carinchi del Periódico Actualidad de Tigre; Luis y la Tana de El Talar, el Turco y Adriana del zanjón Miramar de a lsla de Tigre y la realizadora audiovisual Marcela Gómez Olarte, entre muchos otros y otras.
La Municipalidad de Tigre colaboró con un micro gratuito ida y vuelta.