XIV ENCUENTRO DE JOVENES Y MEMORIA Estudiar en una escuela sin aulas
En el barrio Primavera de Villa Scasso hay un solo edificio educativo que corresponde a una escuela primaria. Allí también funciona la secundaria Nº142 que no tiene edificio y a la que asisten 755 estudiantes. Los estudiantes hicieron una obra de teatro para reclamar por su derecho a la educación.
ANDAR en Chapa
(Agencia) La obra se llama Scasso de edificio. Son catorce minutos en los que los jóvenes representan la historia de su escuela y los vaivenes para conseguir un edificio donde estudiar. “Nuestra escuela solo tiene hasta 5to año porque no hay lugar para tener un 6to y terminar la secundaria. No podemos hacer más nada porque no hay lugar”, dice Juan, que tiene 14 años y va a la escuela Nº142 de Villa Scasso que no tiene edificio propio.
“Cuando tenemos que hacer educación física está el recreo de la primaria y nos chocamos. Así de complicados estamos con el espacio. Por eso trajimos nuestro reclamo acá, porque en Chapa se expande más nuestra voz, nos escuchan más personas y conocen nuestra historia”, aclara Noelia que es el primer año que participa pero sus compañeros ya le explicaron “de qué se trata”.
A este panorama, Cintia agrega que “hacen faltan sillas. Empieza el día y no podemos empezar la clase porque no tenemos sillas, tenemos que recorrer todas las aulas y a veces no hay. Y cuando llueve se inunda y no podemos ni entrar a la escuela”.
En Villa Scasso hay tres secundarias pero sólo una está ubicada en la barrio Primavera en donde no ingresan colectivos, esa es la EES Nº142. La avenida más cercana queda a doce cuadras. Por este motivo los jóvenes necesitan de una pronta resolución del conflicto porque es a la única escuela que pueden ir.
Christian Ávalos, profesor de la escuela y coordinador de la obra que presentaron en esta edición del Programa Jóvenes y Memoria, señala que “esta escuela pertenece a una gran comunidad, en su mayoría de origen guaraní. Falta la construcción de un edificio porque el barrio realmente creció mucho, yo hice el censo 2001 y 2010 y el aumento de población es exponencial”.
Los vecinos del barrio son inmigrantes que no pueden acceder a tierras y por eso se organizan entre ellos para lotear los campos y asentarse. Los hijos de los trabajadores que viven ahí van a la escuela primaria, pero para terminar la secundaria antes se tenían que ir a otro lado. A partir de una serie de presentaciones formales se creó la secundaria que, aunque aún no tiene sexto año, está sobrepoblada. “La escuela secundaria hace falta porque además no hay baño, no hay sala de profesores, es un espacio muy reducido, han hecho aulas modulares pero no alcanzan”, detalla Ávalos.
“Hicimos reclamos en La Plata, en la municipalidad y en el Consejo Escolar. Nos escuchan, nos reciben, pero queda ahí”, comenta el profesor y agrega que “una vez vino la unidad escolar fue a ver un terreno y nos dijo que iban a hacer la escuela. Pero le robaron acá en el barrio y no volvieron a venir”.