LA JUSTICIA RECONOCE QUE FUE GATILLO FÁCIL Elevan a juicio la causa por la muerte de Matías Banuera
El asesinato del joven de 14 años en Quilmes oeste fue elevado a juicio, un año después de los hechos, con un policía imputado por homicidio agravado y tentativa de homicidio, y otros tres por encubrimiento. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) representa a las familias de las víctimas en el proceso y solicita que se amplíen las imputaciones.
ANDAR en Quilmes
(Agencia Andar) El juez de Garantías 2, Martín Nolfi, a cargo de la elevación, describió que “no fueron secuestradas en el lugar armas de fuego ni rastros del uso de armas por parte de las víctimas, no existiendo ningún elemento que permita inferir que éstas se hallaban en posesión de un artefacto similar y que efectivamente lo emplearon contra aquel policía”. La CPM, como representante de las familias de las víctimas, solicita que todos los policías sean juzgados por tentativa de homicidio, ya que los mismos agentes admitieron haber disparado contra los chicos que corrían. Así lo pidió también la fiscal Ximena Santoro.
Los cuatro miembros de la Policía Bonaerense acusados son Cristian Alejos, que quedó individualizado como autor del disparo a partir de las pericias, Maximiliano Aguirre, Lucas Bulllosa y Manuel Argañaraz.
Esa madrugada de fines de julio los policías estaban en una celebración familiar cuando se cruzaron en la esquina un grupo de chicos entre los que estaba Matías. “Che, qué onda, ustedes no son del barrio, están de visitantes, la concha de su madre”, desafió uno de los hombres a los jóvenes. Matías reaccionó y los enfrentó sin saber que entre quienes los increpaban estaban los cuatro agentes imputados que formaban parte de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) de la Bonaerense.
Ante una pelea desigual, los chicos salieron corriendo, los funcionarios ingresaron a la casa a buscar sus armas y salieron a perseguirlos a los tiros. Tras las detonaciones, Matías cayó herido de muerte. Su caso es uno de los que engrosa los números del último informe anual de la CPM en el que registraron 121 muertes por uso letal de la fuerza en 2017, un 11% más que el año anterior. Casi el 80% de las víctimas tenían menos de 30 años y en el 73% de los casos el policía que mató estaba fuera de servicio.
Ahora se espera que se sortee el tribunal donde se juzgará a los responsables de este asesinato.