Documento emitido por las asambleas en la convocatoria a plaza moreno del 11/04
Los VECINOS de la ciudad de La Plata ,conjuntamente con asociaciones civiles, asambleas barriales, y clubes expresamos que lo ocurrido el pasado 2 de abril que se cobro la VIDA más de 54 personas FUE LA CONSECUENCIA TRAGICA DELA DESIDIA POLITICA EN LA QUE VIVIMOS SUMERGIDOS; LOS PLATENSES NOS INUNDAMOS PORQUE ANTES QUE EL AGUA NOS TAPO LA CORRUPCION ENQUISTADA EN TODOS LOS NIVELES DE GOBIERNO. Y a las inundaciones de 2002, 2005 y 2008 habían puesto de manifiesto lo que veníamos denunciando la ausencia del Estado plasmada en la falta de obras estructurales e inversión estatal; la insensatez de los funcionarios manifestada en la inadmisible especulación inmobiliaria; el daño ambiental producido deliberadamente, etc.
La indiferencia y la soberbia de nuestros gobernantes hicieron que estos reclamos jamás fueran escuchados. Hoy nos sorprende la tragedia y nos muestra con crueldad el desamparo al que estamos sometidos, somos una ciudad que llora, una ciudad devastada, sitiada por el dolor y la impotencia de quienes mas allá de haberlo perdido todo se contentan con haber conservado el bien más preciado que es LA VIDA. La inundación dejó al descubierto mucho más que la ineptitud de la clase gobernante para gestionar; nos hizo darnos cuenta que estamos expuestos a la soledad más absoluta; que quienes deben velar por nosotros tienen un profundo desprecio por la vida; y la verdad como base para la construcción de una sociedad democrática. La catástrofe que vivimos fue la resultante de una conjunción de factores climáticos pero sobre todo políticos; la sanción del Código de Ordenamiento Urbano, con la complicidad del gobierno provincial, que fue hecho a medida de los empresarios permitiendo el crecimiento urbano descontrolado cuya única finalidad fue engrosar las cuentas bancarias de los amigos del poder; la nula capacidad de la gestión municipal frente al Estado nacional y provincial, que priorizo siempre su posicionamiento en la interna política en vez del bienestar de los vecinos; la inmoralidad de la mentira frente a la perdida de la vida humana. Queda claro que quienes nos gobiernan piden una madurez política que son incapaces de practicar cuando priorizan el propio interés frente al bien común; no hablan de grandes desafíos como sociedad pero son incapaces de dimensionar el desafío al que se enfrentan como funcionarios; reducen lo ocurrido a un mero fenómeno climático subestimando así su responsabilidad; hacen un llamado a la reconstrucción cuando han sido los paladines de la destrucción; hablan de héroes anónimos, a los que con justicia hay que reconocer, pero con los cuales nunca se podrán comparar; adulan el coraje y la voluntad del pueblo platense, ese que no tuvieron ni para hablarnos con la verdad.
No se equivoque Sr. Intendente esto se podría haber evitado, Ud. tiene esa responsabilidad porque esto fue un desastre natural producido fundamentalmente por la catástrofe de la política. Y es cierto que nuestra querida ciudad está en crisis pero no es de tipo institucional sino MORAL, no alcanza con disculparse porque ello no reconstruye la confianza quebrantada y mucho menos alivia el dolor de la pérdida irreparable de la vida de muchos platenses; se requiere de su parte un acto de sensatez para saberse responsable, ese mismo que Ud. osa pedirnos a quienes estuvimos desde el primer momento ayudando a salvar vidas, solidarizándonos con los vecinos, sufriendo en carne propia lo que sucedía a nuestros familiares, amigos y conciudadanos. Resulta evidente que el 2 de abril comenzó una nueva etapa, en la que nosotros no tenemos más opción que aprender a vivir con el dolor de lo ocurrido; pero la vivencia de ese dolor implica también la búsqueda de responsables; y entiéndase bien: responsables NO CULPABLES; responsables que por acción u omisión no fueron capaces de tomar las decisiones correctas para garantizarnos nada menos que el DERECHO A LA VIDA misma. Y en esa responsabilidad indelegable que Ud. asumió en el ejercicio de la función pública es justamente lo que nos legitima como sociedad; como titulares de la soberanía popular para solicitar al Concejo Deliberante que inicie el debido proceso de JUICIO POLITICO amparado en la figura de incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Para nosotros ese camino será penoso pero estaremos guiados po rla luz de la esperanza; que se brillo con intensidad en las infinitas muestras de solidaridad, que hizo que nos reconociéramos el uno en el otro aun estando en la orfandad estatal más absoluta; que supo ser nuestra guía en medio de tanta caótica desidia gubernamental.
Frente a este desastre los vecinos hemos dado una muestra de ejemplificadora de sensatez moral, solidaridad fraterna y de lealtad a los verdaderos valores de la patria y estamos convencidos de que esta nueva etapa que iniciamos implicara necesariamente RECUPERAR LA CIUDAD PARA QUE VUELVA A ESTAR EN MANOS DE LOSVECINOS