PROGRAMA JÓVENES Y MEMORIA DE LA CPM Doce mil jóvenes piensan juntos pasado y presente
(Agencia) Desde el 26 de junio y hasta el 18 de julio, estudiantes secundarios de escuelas públicas y privadas de la provincia de Buenos Aires y jóvenes que integran organizaciones sociales, políticas y culturales se están encontrando en diferentes puntos del territorio provincial a fin de compartir miradas y opiniones sobre el pasado, el presente, y la vulneración de los derechos humanos. En total, son 12 mil los jóvenes que este año participan del Programa Jóvenes y Memoria de la Comisión por la Memoria de la provincia de Buenos Aires (CPM), que en esta edición propone la investigación bajo el eje “Vivir Juntos. Los desafíos por la igualdad”.
El Programa “Jóvenes y Memoria. Recordamos para el futuro”, fue creado en el año 2002 por la CPM, a fin de reconocer el derecho a la memoria en las nuevas generaciones y promover el sentido crítico del pasado como parte del proceso de construcción de la identidad de los chicos, en el marco del proceso de profundización de la democracia. Durante todo el año, los chicos investigan sobre la historia reciente y sobre el presente en sus comunidades y participan de diferentes propuestas de encuentro con jóvenes de otras instituciones y localidades. Al momento, el Programa se encuentra transitando la instancia de los intercambios regionales que convocan cerca de 400 jóvenes en cada una de las jornadas.
“Los encuentros regionales que promovemos sirven para que los chicos conozcan la dimensión del programa del que están participando y puedan ver que no sólo sucede en su escuela, sino también en otras escuelas, en el barrio y en otras instituciones donde jóvenes como ellos se hacen las mismas preguntas y se encuentran atravesando los mismos obstáculos”, explica Maria Elena Saraví, directora del Programa Jóvenes y Memoria, en referencia a los 17 encuentros pautados hasta las vacaciones de invierno. Saraví destacó que “siempre es motivador para los chicos -que es la primera vez que se encuentran- interactuar con otros que están haciendo un trabajo similar”.
Los temas que abordan los proyectos de investigación son memorias de la dictadura, violencia de género, agenda actual de derechos humanos, violencia institucional y exclusión social, entre otros. De los 828 proyectos presentados en 2014, más de 500 tienen como propósito analizar algún eje de la realidad actual.
“Desde la creación del programa y durante varios años, los temas de investigación presentados abordaban preponderantemente la dictadura cívico militar argentina. Hoy esa relación es inversa. La pregunta que surge es qué tanto tiene que ver nuestro presente con ese pasado, qué cosas hoy pueden estar ocurriendo que tienen que ver con aquello que pasó”, explicó la directora del programa.
Luego de los encuentros, los jóvenes plasman sus investigaciones en diferentes soportes como producciones audiovisuales, musicales, obras de teatro, libros, entre otros, y a fin de año los comparten y exhiben en un encuentro masivo de cierra en el complejo turístico de Chapadmalal.
Efecto multiplicador
Desde 2002 el Programa Jóvenes y Memoria contó con la participación de más de 50 mil jóvenes agrupados en 4 mil equipos de trabajo provenientes de 104 distritos de la provincia de Buenos Aires. Algunos de los trabajos de investigación presentados han servido como aporte a la justicia para el esclarecimiento de delitos de lesa humanidad, han propiciado el encuentro de comunidades desarticuladas por la dictadura, o han posibilitado que se conozcan historias olvidadas.
“La dimensión del programa en números es impactante”, expresó Maria Elena Saraví y agregó que “la continuidad que ha tenido este proyecto educativo, 13 años ininterrumpidos, también es una novedad”. “Sin embargo lo más interesante del programa es ese impacto que no se puede medir, que tiene que ver con qué le pasó en particular a cada joven, qué horizontes nuevos fueron propiciados y a su vez lo que él mismo o el grupo de trabajo movilizó en su comunidad”, sostuvo.
En los últimos años el programa incrementó la participación de organizaciones sociales (políticas y barriales). Para esta edición, cerca de 120 organizaciones presentaron un proyecto de investigación. Al respecto, la directora del Programa explicó que “las organizaciones se presentan como un espacio en donde los jóvenes no acuden obligatoriamente, eso define un vínculo diferente, más familiar, con los coordinadores. Además los grupos son más heterogéneos, conformados por chicos y adultos. El origen de las organizaciones tiene una marca más territorial, una fuerte identidad con el barrio y aportan la mirada desde ahí lo cual es muy valioso”.
Con voz propia
Ariel, de la ESB N°10 de Berazategui, tiene 12 años y es uno de los 400 jóvenes que participaron del encuentro regional realizado en Berazategui el pasado lunes. Contó que está trabajando en un proyecto de violencia de género y estudiando la vida de la feminista argentina, Julieta Lanteri, “ella luchaba por los derechos de la mujeres y tenía un movimiento de mujeres para organizarse, porque antes en la época de ella no podían hacer nada. Las mujeres estaban todo el día en la casa cuidando los chicos. Ahora las mujeres pueden trabajar, tener sus estudios», explicó Ariel sobre las motivaciones que habían conducido a él y a sus compañeros a tratar el tema. También señaló que además de hablar de su trabajo, «está bueno cruzarse con más personas, no estar todo el día en la escuela. Los otros chicos están con otros proyectos que son interesantes».
Agustina, estudiante del colegio Sagrado Corazón de Florencio Varela, tiene 17 años y está trabajando junto a 15 compañeros sobre la apertura de los archivos municipales de la dictadura. “Vemos por qué no se abren: cuando vas a la municipalidad dicen que están abiertos pero cuando se los quieren ver no están. Para tratar eso estamos haciendo entrevistas a gente de Varela. A mí me gusta mucho el tema, soy militante y me pareció buena la idea de investigar y aprender todo lo que es sobre la dictadura», destacó.
Los encuentros regionales también contemplan un espacio de capacitación entre coordinadores de proyectos que son docentes o referentes de organizaciones sociales. Aníbal es profesor de literatura de la EEM N°9 de Florencio Varela y es la primera vez que participa del programa. “Me encontré con la posibilidad de cambio”, señaló y dijo que “estas son prácticas y espacios que nos pueden ayudar a modificar estos roles que tienen que ver con la normalización, con la homogenización, propios de la historia de la institución escolar”. Por su parte, Patricia, profesora de historia de la ESB N° 17 de Florencia Varela, destacó que “lo importante es esta idea de que los chicos se apropien del espacio, que no se vea como un proyecto de los profesores o de la escuela, sino que sea realmente un espacio donde los chicos se puedan expresar y decidir”.
El Programa Jóvenes y Memoria cuenta con un equipo de voluntarios y coordinadores que llevan adelante la organización de los encuentros. Alejandra, una de las integrantes del programa, narró su acercamiento al espacio: «Soy de Tandil, conocí el programa ahí hace 5 años. Me acerqué a ayudar a unas chicas que estaban haciendo un corto. En ese momento, no sabía de lo que se trataba el programa y me quedé tan sorprendida que quise seguir participando. Al año siguiente empecé a dar un taller de video en los encuentros regionales y en Chapadmalal».