ACUSADA INJUSTAMENTE POR NO HABER EVITADO EL ASESINATO DE SU HIJA Libertad para Yanina Farías y 13 años de prisión para José Leguizamón
Después de estar detenida 600 días, Yanina Farías recuperó la libertad. Durante la audiencia de alegatos, el fiscal retiró la acusación contra ella y el Tribunal Oral Criminal 4 de Mercedes ordenó su sobreseimiento. Yanina había llegado al juicio acusada de la muerte de su hija, Xiomara, por no haber impedido su asesinato. La nena de dos años fue asesinada a golpes por José Leguizamón, el hombre con el que compartió casa algunas semanas y que sometió con violencia a la mujer y sus niños. Leguizamón fue condenado a 13 años de prisión por homicidio simple, pese a que el fiscal de la causa había solicitado condena perpetua o 22 años por homicidio con alevosía. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) fue veedora del juicio y resaltó la necesidad de establecer un protocolo para juzgar con perspectiva de género.
ANDAR en Mercedes
(Agencia Andar) “No tengo palabras para decir cómo me siento. Pasamos por mucho dolor y angustia. Mi hija no tenía ninguna culpa, sin embargo el tiempo que ella perdió adentro ya no vuelve”, declaró Catalino Humerez, el padrastro de Yanina, tras conocer la decisión de la justicia de sobreseer a la mujer que estuvo 600 días detenida, acusada de no haber evitado la muerte de su hija de dos años.
“No hubo otro camino que hacer lugar a la justicia. La lucha y la acción coordinada de los organismos de derechos humanos y organizaciones de mujeres lograron imponer, de hecho, la perspectiva de género; un protocolo que la justicia no tiene, que todavía nos debe”, señaló la directora del programa de Litigio Estratégico de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM).
Yanina llegó al juicio acusada por homicidio agravado por el vínculo. Toda la imputación se basó en la investigación preliminar, coordinada por el fiscal Gabriel Lorenzo; esa instrucción en ningún momento consideró el contexto de violencia de género que sufría Yanina. Esa actitud del fiscal no sólo impidió llevar adelante una investigación profunda de los hechos que permitiera llegar a la verdad, sino que además la condenó a Yanina a una detención injusta e innecesaria. De haberse realizado una instrucción seria, ella no tendría siquiera que haber llegado a este juicio.
La falta de una perspectiva de género y la parcialidad de esa investigación quedaron rápidamente expuestas en el debate oral. A lo largo de las audiencias, y ante las pruebas testimoniales, el fiscal de juicio Guillermo Altube primero anticipó un cambio de la acusación, responsabilizando a Yanina por no haber evitado la muerte de Xiomara y, finalmente, hoy en la audiencia de alegatos, desestimó la acusación.
“Esta decisión es lógica con lo que vimos en el desarrollo del debate, que se coronó con la declaración que hizo Yanina en la última audiencia. Esta declaración detalla el contexto en el cual se enmarcó el hecho, su condición de víctima de violencia de género, las características que las pruebas periciales, y otras pruebas que constan en la causa, son muy claras respecto del accionar violento de Leguizamón”, resumió Margarita Jarque sobre la veeduría del juicio que realizó el programa de Litigio Estratégico de la CPM.
En julio de 2017, a pedido de su madre, Yanina Farías fue a cuidar una casilla en Cuartel V, Moreno con su hija Xiomara de dos años y su hijo Juan, de cuatro. A ese mismo lugar, también por decisión de la madre de Yanina, fue a vivir José Alfredo Leguizamón. Durante 17 días, Yanina fue golpeada, sometida, violada y amenazada. Xiomara y Juan también fueron golpeados.
El 6 de agosto, Leguizamón comenzó a atacar a Xiomara, molesto porque lloraba. Yanina intentó protegerla con su cuerpo; a pesar de esa resistencia, la nena de dos años sufrió un fuerte golpe de puño en la cabeza que desencadenaría en su muerte. Yanina cayó al piso; en ese momento, su hijo de 4 años intentó defenderla y también fue golpeado. Cuando Yanina se levantó, se dio cuenta de que la nena respiraba con dificultad y perdía el conocimiento. Ella salió a pedir ayuda, pero Leguizamón se la quitó de los brazos con el afán de encubrirse y mostrar preocupación por Xiomara. En la Unidad de Pronta Atención de la zona, Yanina fue separada de su hija y entregada a la policía. Xiomara murió al día siguiente, Yanina fue traslada primero a la comisaría 4ª de Moreno y después la Unidad Penitenciaria 51 de Magdalena.
A pesar de tener hijos a su cargo, la justicia nunca le otorgó la prisión domiciliaria. La decisión del TOC 4 de Mercedes es el primer hecho de justicia. «Había señales que indicaban que se tendrían en cuenta las situaciones de violencia de género y que se trataba de un femicidio vinculado. Aparecía como lógico que el fiscal Altube desistiera de la acusación”, expresó el abogado de Yanina, Alejandro Bois. Y agregó: “Yanina ya se va en libertad y esto se logró también con la inteligencia de los planteos políticos que se han hecho y, por supuesto con toda la movilización en la calle, en Mercedes y a nivel nacional».
José Alfredo Leguizamón fue condenado por el tribunal a 13 años de prisión por homicidio simple. Bois esperaba que el tribunal haga lugar a su pedido y Leguizamón sea condenado por femicidio vinculado. Esta figura jurídica se emplea cuando el hombre, en un contexto de violencia de género, agrede a una persona cercana para generarle a la mujer un sufrimiento aún mayor. Por ese motivo, el fiscal había solicitado una condena perpetua o, en su defecto, 22 años de prisión por homicidio con alevosía. El tribunal no consideró los agravantes en el vínculo, ni tuvo en cuenta la desigualdad sexo-genérica, por lo que juzgó a Leguizamón bajo la figura de homicidio simple.
“Los jueces deben recordar que tienen la obligación de juzgar con perspectiva de género y también tienen la obligación de encuadrar a quienes tienen frente a su persona en el marco de sus circunstancias. Esto debiera tornarse ya una obligación para toda intervención judicial en la provincia de Buenos Aires, donde no hay un protocolo para juzgar con perspectiva de género. Vamos a instar a que la propia Suprema Corte sea la que genere uno”, concluyó Margarita Jarque.
Durante la audiencia de hoy estuvo presente la madre de Plaza de Mayo—Línea Fundadora e integrante de la CPM, Nora Cortiñas. Mientras que en las puertas de los tribunales de Mercedes y, como ocurrió a lo largo de todo el juicio, una gran cantidad de organizaciones feministas y territoriales celebraron la libertad para Yanina.