CONOCIMIENTOS Y PRÁCTICAS PARA UNA VIDA MÁS SALUDABLE Novedosa propuesta de participación e intervención por la conciencia ecológica
ANDAR en Olavarría
(AC-FACSO) Desde separar los residuos debidamente hasta pensar cómo afecta a la sociedad el accionar de distintas tendencias, EcoNciencia propone el ejercicio de la reflexión y concientización de una forma novedosa y creativa. Ingenieros, artesanos, investigadores universitarios, estudiantes de secundaria y artistas visuales. Todos se encuentran para trabajar y reflexionar sobre el medioambiente.
“Tenemos muchas malas costumbres por lo que intentamos fomentar con distintas metodologías y desde espacios sanos la conciencia ambiental, pensando en el presente y en el futuro”, señala Cielo Eugui de 23 años, estudiante de Ingeniería y Profesorado en Química e integrante de EcoNciencia, una feria ambiental que se realiza en Olavarría desde junio de 2013. Los encuentros ofrecen charlas, talleres, muestras artísticas, debates académicos y proyecciones de cortometrajes, entre otras actividades que reflejan un carácter interdisciplinar e integrador. Así, el último encuentro trató sobre la explotación del Cerro Santa Bárbara (Cerro Largo), jornada que incluyó una charla-debate entre Víctor Lenzetti, titular de las empresas Polcecal y Polysan y vecinos de Sierras Bayas. Las propuestas buscan poner de manifiesto temas que preocupan a la sociedad olavarriense, acercando el saber académico a la comunidad para permitir el diálogo y la reflexión en común.
“Comenzamos con la necesidad de nuclear las perspectivas alternativas que hay en la ciudad, siempre reviendo cómo afectan la industrialización y las prácticas humanas a nuestro entorno. Lo pensamos como un granito de arena”, destaca la joven Eugui quien fue una parte fundamental para el surgimiento de este grupo que hoy cuenta con 5 integrantes estables más la colaboración alternada de otras personas. “Apostamos por integrar lo perteneciente al campo científico con cuestiones cotidianas que están insertas dentro de tu casa, de tu familia, que están adquiridas. Eso quizás siempre estuvo en veredas opuestas cuando en realidad tienen mucho que ver”, analiza Daiana Martinefsky, estudiante de Comunicación Social, miembro y organizadora de las ferias ambientales.
EcoNciencia surgió de la labor de alumnos, docentes e investigadores de las facultades de Ingeniería, Ciencias Sociales y Ciencias de la Salud, quienes con el apoyo y colaboración de distintos grupos locales comprometidos con la temática lograron transformar la idea en ferias ambientales. “Un aprendizaje por sí solo, encerrado en su mismo conocimiento, se agota en un momento si no se va integrando y complementando con otras cosas. Siempre terminás recayendo en lo mismo y en un estancamiento que tal vez te limite hasta en tu mismo campo de acción”, reflexiona Martinefsky.
Trabajo y participación con la comunidad
La importancia de sumar esfuerzos y objetivos en común es una de las características que sobresale de la propuesta. “Lo que apuntamos con la interdisciplinariedad es integrar diferentes conocimientos y prácticas en distintos campos. No agotar los recursos prácticos y teóricos sino darle una vuelta de tuerca más, buscar otros horizontes de acción”, enfatiza Martinefsky. Han sido y son parte de las ferias ambientales el grupo de Permacultura, el Coro Universitario, la biblioteca-taller Itinerante Del otro Lado del Árbol, Apoaa, estudiantes de la Escuela Nacional Adolfo Pérez Esquivel, la Comunidad Mapuche Urbana Pillán Manké, profesoras de yoga, artesanos y el reciente grupo artístico Parapeatón.
[pullquote]Apostamos por integrar lo perteneciente al campo científico con cuestiones cotidianas [/pullquote]
“Lo importante pasa porque esa articulación y trabajo en conjunto se expanda y logre un vínculo con la comunidad. Con los encuentros tratamos de generar una interacción y una forma de trabajar para que aquella persona que se acerca pueda aprender o repensar algo nuevo”, destaca Eugui.
Las tres ferias realizadas en el año por EcoNciencia trataron temáticas como el impacto de los agroquímicos en la salud de la población, la explotación ambiental, el agotamiento de los recursos naturales, la contaminación industrial y medioambiental, cultura, educación, salud y alimentación. Ante esta diversidad de temáticas y fenómenos el trabajo en conjunto entre estudiantes, docentes e investigadores de la UNICEN y distintos grupos de la ciudad resulta fundamental para tratar de alcanzar los objetivos. “Hay muchos aspectos por trabajar y solos, cada uno por su lado, es más difícil, por lo que tratamos de integrar y generar un espacio colaborativo. Todos estamos luchando por lo mismo”, destaca Eugui. “Cuestionamos prácticas que tenemos naturalizadas, que tal vez son más nocivas de lo que aparentan. Hay que tratar de ver aquello que nos rodea y pensar qué tan bueno o no, es”, concluye Martinefsky.
Seguir trabajando y promoviendo la reflexión en la comunidad es una característica fundamental para continuar. La educación alternativa, el trabajo social en barrios, proyectos de cuidado ambiental en el Campus Universitario y el fomento de espacios verdes son objetivos a lograr en el mediano plazo. EcoNciencia se presenta como una propuesta que intenta demostrar que el trabajo en conjunto entre niños, niñas, jóvenes y adultos es posible, especialmente si se piensa en construir un futuro mejor, más sano y saludable./