HOMICIDIO AGRAVADO POR ODIO A LA IDENTIDAD DE GENERO Y SER POLICIAS Detuvieron a 10 policías bonaerenses por el asesinato de una mujer trans en una comisaría de Pilar
ANDAR en la Justicia
(Agencia) Con especial énfasis en la perspectiva de género, la referencia a los crímenes de odio y al travesticidio como parte estructural de las violencias que padecen las personas trans, los fiscales Esteban Álvarez –de la unidad fiscal de investigación de drogas ilícitas de San Isidro-, Manuel Cayuela –de la fiscalía especializada en Violencia de Género- y la ayudante fiscal Victoria Santamaría dieron especial impulso a una causa que comenzó con muchas dilaciones en torno a la averiguación de causales de muerte y que hoy investiga el homicidio agravado por odio a la identidad de género y su encubrimiento.
El asesinato de Sofía Fernández, de 39 años, ocurrió el lunes 10 de abril de 2023, dos días después de su detención y alojamiento en la Comisaría 5° de Presidente Derqui, partido de Pilar. Más allá de la versión falsa del personal policial (muerte súbita y el hallazgo inesperado del cuerpo sin vida), la autopsia fue reveladora: la muerte había sido producida por un mecanismo violento y como consecuencia final de un paro cardiorrespiratorio traumático.
En este sentido, se determinó que Sofía padeció una asfixia por obstrucción de la vía aérea provocada por restos textiles. Por eso, en su pedido de detención de los imputados el equipo de fiscales dio por probado que “cinco de los policías introdujeron en la boca de Sofía –en forma premeditada con la intención de quitarle la vida- una bombacha y pedazos del colchón de la celda (…) en un claro contexto de violencia de género y odio a su identidad de género”.
Los policías procesados y ahora detenidos por el homicidio agravado por odio a la identidad de género agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por ser miembros de la fuerza policial son el oficial ayudante de la seccional Carlos Matías Rodríguez, la sargento Yésica Isabel Núñez, la subteniente Edith Viviana Ruiz, el sargento Gonzalo Robles y el suboficial ayudante Ezequiel Francisco Ávalos.
Por su parte, otros cinco están imputados por encubrimiento agravado por resultar el hecho especialmente grave, por haber sido perpetrado por miembros de la fuerza policial y por falsificación de documento público. Ellos son: el comisario Daniel Eduardo Salerni, el oficial ayudante Gustavo Camacho, la oficial principal Miriam Valor, la sargento Gabriela Miño y la oficial Camila Pitulak.
En su escrito los fiscales detallaron que estos cinco imputados por encubrimiento actuaron con la finalidad de ocultar el delito de homicidio en las primeras horas, procurar la impunidad de los ejecutores y evitar la averiguación de la verdad.
Cabe agregar que en la autopsia también determinó las marcas de golpes en el cuerpo y en la cara de Sofía que habrían sido provocados por objetos contundentes; también presentaba marcas en brazos y piernas. Asimismo, se detectó ADN femenino en las partes íntimas de la víctima, un indicio de abuso sexual padecido durante las vejaciones.
Hasta el momento de la detención de los 10 imputados -ocurrida el miércoles 1 de mayo- todos continuaban prestando servicios en la Policía bonaerense en diferentes comisarías de Pilar. Ahora fueron desafectados de la fuerza y habrían terminado de prestar declaración indagatoria ayer jueves en sede judicial.
Amigos y familiares de Sofía, junto a organizaciones sociales y de derechos humanos, celebraron en las últimas horas el importante avance de la causa, no solo por la detención de los 10 imputados sino por el abordaje integral y profundo del equipo de fiscales que dotó de impulso y rigor a la investigación penal.