SE PROYECTA LA PIBADA Alzar la voz
Este jueves 7 de noviembre a las 16.30 hs se presenta La voz de la pibada, un cortometraje realizado con niñas, niños y jóvenes de 14 barrios de La Plata para visibilizar sus derechos y deseos. La proyección será en el anexo del Senado (7 y 49) y como cierre de la presentación, que también contará con diversas expresiones artísticas, se movilizarán hasta Plaza San Martín.
ANDAR en La Plata
(Agencia Andar) La jornada busca visibilizar el rol que las organizaciones comunitarias cumplen en la construcción de proyectos de vida con los pibes y pibas, y plantear la necesidad de un Estado que acompañe a los barrios y sus proyectos comunitarios. Con los y las educadoras de esos espacios se gestó el guión y se concretó el rodaje de esta producción. El texto que le da base se construyó para la primera marcha El hambre es un crimen en septiembre de 2017.
“Ese texto a mí me interpelaba bastante y quedó latente la posibilidad de darle otro uso, que tenga otro impacto, que evolucione. Al año siguiente empecé a conectarme con gente que había trabajado lo audiovisual en la marcha, y se armó un grupo inicial del rodaje. La propuesta fue dividir ese texto en 14 párrafos y fuimos eligiendo 14 barrios con la idea de que el texto fuera tomado por otros pibes y pibas y eligieran donde contarlo, cómo leerlo”, cuenta Damián Demaro, uno de los realizadores.
Así fueron visitando organizaciones barriales para lograr eso, que los chicos y chicas elijan quién iba a hablar y dónde leer qué parte del texto. “En cada lugar desarrollamos alguna actividad, que también es parte de los insumos de imagen que aparecen en el corto. El primer encuentro era clave porque nosotros también teníamos que aprender qué pasaba ahí”, explica Damián que hizo ese recorrido junto con el equipo de realizadores y que les llevó unos dos o tres meses por cada organización.
Y el texto fue repensado, reescrito y trabajado a partir del debate e intercambio de ideas y experiencias de los distintos territorios y vidas. Comedores, clubes, organizaciones de niñez, una orquestas, casas de día, hogares asistenciales, una murga, un grupo de teatro. “Me impactó la gran diferencia de abordaje de los distintos lugares y eso tuvo una riqueza impresionante”, asegura el realizador. “Por ejemplo en El Rincón había dos educadoras, una mamá y una abuela del barrio, una enseña repostería y la otra baile. Por ahí llegamos al barrio que es más nuevo y hay una energía más de los del barrio de juntarse a hacer cosas. Después en El Futuro el trabajo es de chicas estudiantes que se levantan temprano el sábado para hacer distintas actividades ahí más desde la militancia. O en El Churrasco que Paula abre sus puertas para una olla popular los viernes y durante la semana da clases de apoyo en su casa y eso cambia cada perspectiva”, describe.
También aparecía la necesidad de leer o trabajar cada parte según las distintas edades. “Eso también se notaba, o el empoderamiento que tienen a partir de la actividad o el espacio de pertenencia, como en el teatro donde se habían apropiado del texto y lo habían cuestionado. También eso da riqueza y es la intención del corto”, dice Damián.
“Esta consigna de la voz de la pibada hay que trasladarla también a la voz en contextos de encierro, en hogares convivenciales y en muchos otros espacios donde las y los niños tienen cosas para decir y en este clima de trabajo conjunto entre las organizaciones se van generando lazos para amplificarla”, considera Marcelo Iafolla desde la Comisión Provincial por la Memoria que apuntaló el proyecto junto a la Facultad de Bellas Artes y Prosecretaría de Políticas Sociales de la Universidad Nacional de La Plata.
Ahora buscan que el mismo corto sea un insumo para seguir cuestionando y que circule junto a nuevos sentidos. Para el próximo año buscan hacer un cine itinerante.