Allanamiento negativo en el penal de Melchor Romero Allanaron sin resultados: continúa la búsqueda de Johana Ramallo
Se realizó un allanamiento en Melchor Romero para intentar dar con el paradero de Johana Ramallo, la joven platense desaparecida desde hace casi 10 meses de la ciudad de La Plata. Su madre, Marta Ramallo, fue contactada por la ONG Madres Víctimas de Trata que aseguraron que a Johana la tenían cautiva en un sótano dentro de la Unidad Penal 34. El Juzgado Federal 1 ordenó un allanamiento que tuvo resultado negativo. Las abogadas que representan a Marta Ramallo no descartaron solicitar nuevas medidas que profundicen la investigación en todo el complejo penitenciario.
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(Agencia) Ayer por la tarde se realizó un allanamiento en la Unidad Penal 34 de la localidad de Melchor Romero para buscar a Johana Ramallo y a otras mujeres posibles víctimas de trata. El Juzgado Federal 1, a cargo del juez Kreplak, dio la orden luego de tomar el testimonio de Margarita Meira, referente de la ONG Madres Víctimas de Trata, quien aseguró que Johana podía estar cautiva en un sótano dentro de ese penal. Kreplak también tomó declaración a Marta Ramallo, madre de Johana, quien solicitó diera cumplimiento a esa medida para descartar todas las posibilidades y quizás tener algún dato mas certero sobre su hija.
Lo que Margarita Meira declaró fue que una mujer de identidad reservada, sobreviviente de una red de trata, logró escapar del penal de Melchor Romero y buscar ayuda. Según Meira, la mujer contactó con ella en su oficina de la organización y le contó que un policía o ex policía llamado Jorge Ceballos, alias “Cinco Minutos”, comanda una red de trata y prostitución en la que participan activamente unos 20 agentes penitenciarios. Según el relato, la red tiene su base de operaciones en un sótano del penal que está destinado a alojar a personas privadas de la libertad que padecen enfermedades psiquiátricas. Ahí mantendrían cautivas a unas diez mujeres que serían sacadas para ser prostituidas en distintos prostíbulos de la zona. Según Meira, la testigo aseguró que entre las mujeres cautivas se encontraba Johana Ramallo.
Este dato generó nuevas expectativas en Marta, que desde hace 9 meses golpea puertas, denuncia, declara ante jueces y fiscales, participa de rastrillajes, allanamientos, moviliza y grita con todas sus fuerzas que su hija de 24 años está retenida contra su voluntad en algún sitio y es posible víctima del delito de trata.
El juez Kreplak derivó desde el inicio la investigación por la causa Johana Ramallo y, por ende todas las diligencias, en la Policía Federal. Hasta el momento, la causa ya lleva más de 20 cuerpos y no ha arrojado dato alguno que indique qué pasó o quienes pueden estar involucrados en la desaparición de Johana. Marta Ramallo, el feminismo organizado y las organizaciones políticas que la acompañan vienen denunciando el entramado de impunidad y la necesaria participación de la policía bonaerense en redes que sostienen la narcocriminalidad y el comercio sexual de la llamada zona roja de la ciudad de La Plata. El testimonio que introdujo Margarita Meira puso en el centro de la escena delictiva al Servicio Penitenciario de Melchor Romero en complicidad con la bonaerense.
Dentro del penal no estuvieron presentes representantes de su juzgado ni el fiscal Hernán Shapiro, a cargo de la causa. Sí estaban el Jefe del Servicio Penitenciario Bonaerense, Xavier Areses, la directora de la U34, Cristina Córdoba, y la abogada de Marta Ramallo, Pía Garralda, quien le transmitió a Marta que en el lugar no se habían encontrado indicios de la joven y no había ningún sótano .
Como lo hizo la fiscal Betina Lacki que derivó la investigación de averiguación de paradero de Johana Ramallo en manos de la policía bonaerense aunque la fuerza estaba sospechada, Kreplak sólo escucha la voz y ve por los ojos de los agentes federales. No apela a organismos que se dedican a la trata de personas, lo que seguramente daría otro ritmo a la causa y, por ende, a acciones certeras que echen luz a la desaparición de Johana y a sus responsables. Kreplak ordenó el allanamiento pero no se hizo presente.
Más allá del impacto de la noticia y el dolor desgarrador que persiste ante el fracaso de cada medida y la ausencia de justicia para conocer la verdad y poder encontrar a Johana, Marta ha logrado fortalecerse y convertir su dolor en lucha. Su lema es “hasta encontrar a Joa y para que aparezcan las chicas víctimas de trata”.
Esta mañana las abogadas iniciaron nuevas medidas para avanzar con las pericias pertinentes en otras dependencias del complejo penitenciario de Melchor Romero.
Fotografia: gentileza de Infoplatense