POR PÉRDIDA DE CONFIANZA EN LA INSTRUCCIÓN DE LA CAUSA A un año del crimen de Gabriel Godoy la CPM pidió el apartamiento del fiscal
Como patrocinante de la familia del joven de 15 años que fue asesinado en el barrio Itatí de Bernal por el policía Vicente Paris, la Comisión Provincial por la Memoria presentó el jueves 4 de mayo ante el fiscal Andrés Nievas Woodgate, titular de la UFI 3 de Quilmes que instruye la causa por homicidio agravado, un escrito en el que le solicita su apartamiento de la investigación ya que no pidió la detención ni la indagatoria del policía imputado, a un año del crimen y con más de una docena de testigos.
ANDAR en Quilmes
(Agencia) Este jueves 4 de mayo, en la sede de la fiscalía 3 de Quilmes, la directora del área de Litigio Estratégico de la CPM, la abogada Margarita Jarque, hizo entrega, en representación de la familia de Gabriel Godoy, del pedido de apartamiento del fiscal Andrés Nievas Woodgate, quien ahora deberá decidir si concede el pedido o lo rechaza.
El último movimiento de la causa por el homicidio del joven se remonta a diciembre pasado, cuando el fiscal tomó declaración a una testigo aportada por la CPM y, habiendose cumplido un año del crimen el 25 de abril, el policía de la DDI de Drogas Ilícitas imputado en la causa continúa trabajando normalmente a pesar de que Asuntos Internos de la Policía recibió la denuncia por su accionar.
El caso ocurrió en el barrio Itatí de Bernal, Quilmes, y hasta ahora no sólo fueron aportados más de una docena de testigos por parte de la familia de la víctima y sus abogados sino que existen importantes evidencias de la intencionalidad dolosa ejercida por Vicente Paris, a partir de los resultados de la autopsia realizada sobre el cuerpo de la víctima.
En efecto, del análisis de los tres impactos de bala que terminaron con la vida de Gabriel se desprende que los disparos fueron realizados desde una distancia considerable, lo que contradice la versión del policía: que su reacción se debió a un acto de legítima defensa ante un presunto intento de robo por parte de Gabriel y su amigo Brian.
En la declaración ante el fiscal, el policía señaló que Gabriel Godoy quiso abrir la puerta de su vehículo y que fue allí cuando accionó su arma reglamentaria, pero las pericias sobre el cuerpo de la víctima demuestran que los disparos fueron a distancia y que dos de ellos impactaron en la espalda.
Frente a la versión de París, distintos testigos afirmaron que en realidad Gabriel y su amigo pasaban por la calle cuando el policía bajó de su camioneta y comenzó a gritarles hasta que comenzó con los disparos.
Es por esta serie de elementos que la CPM pidió el apartamiento del fiscal, que no decidió en ningún momento la detención del imputado ni el llamado a declaración indagatoria. Ninguno de los testigos de la causa fue obtenido por acción del propio fiscal, lo que evidencia la falta de compromiso en la investigación y la pasiva aceptación de la versión del policía.
En el escrito presentado por la CPM ante la Fiscalía 3, se señala que “pareciera que el agente fiscal se ha vencido sin más en la búsqueda de la verdad material, adoptando como única teoría del caso la hipótesis sostenida por la defensa del imputado Paris, omitiendo contrarrestar la totalidad de las pruebas existentes en la causa”. “Tanto la falta de actividad conducente, como la falta de producción de elementos probatorios relevantes para el descubrimiento de la verdad, colocan al señor agente fiscal en una zona de ausente objetividad para la dirección de la investigación”, señala el documento.
Cabe recordar que a raíz del asesinato de Gabriel se iniciaron tres causas penales: la principal, investiga el homicidio agravado; una segunda causa, que corre por cuerda de la principal, es la referida al presunto robo agravado por el uso de arma denunciado por Vicente Paris y en el que señala a los dos jóvenes; la tercera tiene como imputado al padre de Gabriel por un episodio confuso ocurrido en la vereda de su casa horas después del crimen, cuando alguien le acercó una manta de la que se se cayó un arma.
Por esta última causa -luego de haber estado una semana detenido- el padre de Gabriel fue sobreseído en juicio por flagrancia al determinarse que el arma no le pertenecía sino que había sido introducida previamente en la manta doblada.
Para el equipo de abogados de la CPM, la causa está prácticamente paralizada y el fiscal –que aduce falta de pruebas para pedir la detención y ordenar la indagatoria- no explica cuáles son los elementos necesarios para avanzar en el esclarecimiento del homicidio.
Asimismo, los abogados advierten sobre la notoria contradicción que surge entre las pruebas de la causa principal (la autopsia prueba que los disparos fueron realizados a distancia) y la declaración testimonial del policía en la causa por presunto robo en la que afirma haberse defendido cuando los jóvenes habrían intentado abrir la puerta de su vehículo.
“Queremos que cumpla una condena”
En diálogo con ANDAR, Paola Núñez, la madre de Gabriel Godoy, afirmó que “a un año del crimen, todavía seguimos esperando que avance la investigación porque lo único que podemos esperar es que el policía vaya preso y cumpla la condena que debe cumplir. Nos quitó a nuestro único hijo y no sé cómo vamos a salir de esto”.
Según Núñez, con el acompañamiento de la CPM la familia se siente más contenida y confía lograr justicia. Sin embargo, explica que el policía Vicente Paris ha hostigado verbalmente a la familia de la víctima en varias oportunidades, como ocurrió en las inmediaciones del juzgado que instruye la causa por el homicidio pocas semanas después del asesinato de Gabriel. Paola y su pareja se habían presentado ante el juez para retirar las pertenencias de su hijo y al salir se cruzaron en la calle con el policía imputado. “Me miraba y se reía mientras se acercaba a nuestro auto. Empezó a gritarme que a mi hijo lo había matado por chorro”, recordó. Además de aquel episodio, durante el último año el policía ha pasado en varias oportunidades por la casa de la familia de Gabriel Godoy realizando gestos intimidatorios.