Productores rurales reclaman un predio en el parque Pereyra
Organizaciones de pequeños productores del cinturón frutihortícola de La Plata, Berazategui y Florencio Varela realizaron el sábado 18 una toma simbólica de un predio estatal en el parque Pereyra, actualmente usurpado por la empresa multinacional Telmex, para exigir al gobierno provincial que apruebe un proyecto de ley que da lugar a la creación de un mercado de productores.
ANDAR en la región
(Agencia/ MPP Movimiento de Pequeños Productores y Productoras) El proyecto fue escrito y presentado por la mesa regional de productores, con el fin de crear un mercado hortícola y florícola que dé solución a la intermediación que se da por parte de los transportistas, quienes generan el mayor aumento en los precios de los productos.
Dicho mercado contaría con un espacio físico para la comercialización de las frutas y verduras, pero además se incluye la creación de un sector de agroindustria para la producción. El proyecto contempla la construcción del mercado en el predio denominado sector A, ubicado en el Parque Pereyra, perteneciente al Estado provincial.
“Este es un proyecto superador que nos puede dar respuesta a la mayoría de los productores de la región de La Plata, Varela y Berazategui”, afirmaron desde la Mesa de Productores, ya que generaría más de 160 puestos de comercialización de verduras y hortalizas en la zona. Además, todos estos puestos estarían administrados por las organizaciones de productores.
Como uno de los objetivos fundamentales del proyecto de ley es la eliminación del eslabón intermedio entre los productores y los mercados, es un beneficio tanto para los primeros, como para los consumidores.
En épocas en que el tomate es cosecha generalizada entre las quintas del cinturón hortícola platense, los productores se ven obligados a vender el cajón de 20 kilos a aproximadamente 25 pesos, debido a la alta competitividad en la oferta del producto. Los intermediarios –quienes ofrecen el servicio de transporte desde las quintas a los grandes mercados y/o puntos de venta minorista- son un actor de presión para que los productores de la zona opten por bajar el precio de sus productos, de lo contrario la cosecha termina por desecharse debido a la imposibilidad de venta.
“Para que nosotros cobremos bien y podamos cubrir todos los gastos (alquiler de la tierra, semillas, e insumos básicos para la producción) el cajón de tomate tiene que valer mínimo cien pesos”, explica Armín Eizaguirre, trabajador rural de Abasto. Los aumentos que se generan en la cadena comercial desde el productor hasta los puntos de venta rondan entre un 500 y un mil por ciento, lo que perjudica principalmente el bolsillo de los productores y repercute negativamente en sus condiciones laborales y de vida, y finalmente en el bolsillo de los consumidores.
El Estado provincial debe decidir si permite que la empresa multinacional Telmex S.A ocupe ilegalmente el predio de propiedad estatal, o si construye un mercado para los pequeños productores de frutas y hortalizas de uno los cinturones más importantes del país, del que dependen más de siete mil productores.
Telmex
La empresa Telmex ofrece servicios de telefonía, internet y televisión por cable, y actualmente es controlada por el grupo Carso, cuyo accionista mayoritario es Carlos Slim, considerado uno de los hombres más ricos del mundo. El magnate mexicano ha puesto el ojo en la Argentina, y más específicamente en las prestadoras de servicios de cable del grupo Vila-Manzano, a partir de que el gobierno de Mauricio Macri, tras disolver los entes reguladores de telecomunicaciones AFSCA y AFTIC vía decreto de necesidad y urgencia (DNU), habilitó el triple play (fusión entre empresas de cable por suscripción, Internet, y telefonía fija).