TAMBIÉN HUBO PENAS DE 25, 18 Y 15 AÑOS PARA LOS DEMÁS IMPUTADOS Juicio de lesa humanidad en Junín: prisión perpetua para Gómez Pola y Bracken
Luego de 12 intensas jornadas de debate oral y público, concluyó el primer juicio contra represores en Junín por delitos cometidos durante la última dictadura militar. Durante la audiencia, hubo una radio abierta y actividades artísticas que se desarrollaron a la entrada de la sede de UNNOBA, donde se realizó el juicio.
ANDAR en los juicios
(Agencia)El miércoles 18 de febrero, El Tribunal Oral en lo Criminal Federal 1 de La Plata integrado por los jueces Carlos Rozansky, Pablo Vega y César Álvarez dieron a conocer, tras una jornada intensa que había iniciado el día anterior, la sentencia contra los imputados por delitos de lesa humanidad cometidos en Junín durante la última dictadura.
Así, todos los represores juzgados resultaron condenados: el exmilitar Angel Gómez Pola y el excomisario Abel Oscar Bracken recibieron la pena de prisión perpetua. El primero fue condenado por los homicidios, doblemente agravados, de Hugo Torreta, Gilberto “Beto” Mesa y Adelmar Romie, en concurso real con privación ilegal de la libertad, agravada y la aplicación de tormentos agravados.
La misma condena alcanzó a Bracken por considerárselo coautor del homicidio de Hugo Torreta, en concurso real con privación ilegal de la libertad, agravada y la aplicación de tormentos agravados.
Por su parte, los expolicías bonaerenses Silvio Manzanares y el médico Aldo Antonio Chiacchetta fueron condenados a la pena de 25 años de prisión e inhabilitación absoluta por el término de la condena por su complicidad en la última dictadura cívico-militar al haber intervenido en el sometimiento del grupo de detenidos ilegales a condiciones inhumanas. Se los consideró coautor de privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos agravados por tratarse de un perseguido político.
Julio Angel Esterlich y Miguel Angel Almirón fueron condenados a la pena de 18 años de prisión en los mismos términos que los imputados anteriores.
Por último, el que terminó recibiendo una condena menor fue el excomisario Edgardo Mastandrea: 15 años de prisión.
El tribunal además ordenó que se diera de baja a todos los condenados y que se les suspendiera jubilación, pensión o retiro, según corresponda una vez que la pena quede firme.