“Es inédita la acusación sobre acción psicológica desplegada por un medio de comunicación”
El fiscal federal de Bahía Blanca, Miguel Palazzani, destaca que la participación del grupo La Nueva Provincia es un aspecto del fenómeno criminal de la dictadura militar que todavía no ha sido explorado: grupos mediáticos que legitimaron y encubrieron la represión.
ANDAR en los juicios
(Por Miguel Palazzani) En torno a la llamada “causa Massot” tenemos la satisfacción de haber podido recolectar prueba que, hasta el momento, no se conocía. Prueba que fue aportada a la causa y que dirimió, desde nuestro punto de vista como fiscales, la responsabilidad penal no solamente del grupo que manejaba La Nueva Provincia sino también la de Vicente Gonzalo Massot, el actual director y dueño de la empresa.
Desde el punto de vista de la investigación, muy satisfechos porque terminamos componiendo una acusación extensa con mucha y profusa prueba, entre la que se encuentra el informe que provino de la CPM en relación a los planes de comunicación de la época, además de todo el acervo probatorio que ya teníamos.
En lo que advertimos que estamos dando la pelea es con respecto al establishment judicial, la corporación judicial bahiense, que muestra resistencias muy fuertes a profundizar las causas en las que se encuentran civiles involucrados, siendo la de Massot la que ha generado una situación de gravedad tal que se encuentran todas las denuncias, en este momento, en el Consejo de la Magistratura contra el juez actuante y el secretario actuante.
Entonces una vez que pasamos al campo de la profundización de las investigaciones contra los civiles, sean del campo eclesiástico como del campo de empresarios periodísticos, inmediatamente la reacción no viene de los defensores o de los asesores de los imputados, sino que directamente proviene de la corporación judicial. Esta es una doble manera de evaluar el avance de la causa Massot.
A nosotros nos parece que es inédita la acusación en el país en lo relativo a la acción psicológica desplegada por La Nueva Provincia en la región. Es un aspecto del fenómeno criminal que todavía no ha sido debidamente explorado.
Los avances de los juicios primero fueron contra los perpetradores directos y, ahora que eso se ha ido consolidando, estamos poniendo la mirada en otros actores igual o más importantes en aquel proceso. En este caso, un aspecto muy importante del fenómeno criminal fue la acción psicológica.
Esta faz del plan, reconocido por los militares desde incluso antes del 75, requería de “tropa propia” –como lo he escuchado decir a Hugo Cañón respecto al comentario que él había escuchado en cierta ocasión de boca de un general bahiense-.
La tropa propia de Bahía Blanca era La Nueva Provincia, que explotaba su lugar de monopolio, su credibilidad en la región; o sea que la población estaba a merced de lo que informara, del discurso que instalaba el diario. En ese marco del terrorismo de estado era un llamado liso y llano al aniquilamiento de todo lo que no respondiera a su modelo de ser nacional, que coincidía con el modelo de las fuerzas armadas. Esto, unido a toda la intimidad que dimos por probada con los altos mandos del ala más dura de las fuerzas armadas.
En fin, desde la fiscalía construimos un cuadro probatorio que pone el foco en un aspecto del fenómeno criminal que todavía no ha sido debidamente abordado. En estos procesos de exterminio masivos, inevitablemente, los perpetradores directos y los ideólogos se deben mover con una instalación de sentido, un diseño de la subjetividad de la población, para generar -como decían ellos mismos en los reglamentos- adhesión, encubrimiento, delación o directamente formar opinión para convencer de que había que exterminar al otro que pensaba diferente.
Estamos en un momento de crisis y de ruptura en la jurisdicción. Hemos denunciado todas las complicidades, hemos recusado al juez y secretario, hemos hecho las denuncias pertinentes en las instancias pertinentes para que se intervenga en esta situación. Nosotros desde la unidad fiscal vamos a profundizar e insistir para que la causa vuelva a tener juez y vamos a insistir para que se lo detenga y procese a Massot de acuerdo al cúmulo probatorio que hemos recolectado.
Entendemos que la designación de juez depende de otros resortes institucionales, pero veremos con qué celeridad eso se pueda resolver. Nosotros creemos que el juez Coleffi, en la causa Massot, no podría ser restablecido de acuerdo a la interpretación de las normas procesales. No obstante, como se dio la situación, entendemos también que se salió un poco de los circuitos normales procesales, por lo que ahí habría que ver cómo se resolverá. Tal vez la situación se modifique.
Por otra parte, el juicio Armada se va desarrollando normalmente, se van produciendo testimonios que acreditan la hipótesis de la acusación, es decir, mostrando la dimensión que tuvo la represión desplegada por la Armada argentina y la actuación conjunta de todas las fuerzas, porque se está probando en este juicio que las víctimas que pasaban por los centros clandestinos de Baterías o el Buque terminaban en el Batallón de Comunicaciones 181. En fin, todo un circuito represivo que incluía a Punta Alta y Bahía Blanca y que actuaba de manera coordinada.
El juicio va muy bien, y en ese aspecto estamos muy conformes porque nos parece que las responsabilidades penales van quedando acreditadas, especialmente de los integrantes de la Armada.