EDUCACION Y MEMORIA Los estudiantes y el juicio en Olavarría: un encuentro de reflexión
Suteba realizó un taller y puesta en común de los trabajos realizados por estudiantes secundarios que asistieron al juicio Monte Peloni. El cierre de las actividades estuvo a cargo de Victoria Montenegro, Ignacio Guido Montoya Carlotto y Paulino Guarido.
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(Agencia Comunica/FACSO) Estudiantes de distintas escuelas de Olavarría compartieron sus experiencias y reflexiones en una jornada organizada por Suteba denominada “Cita con la memoria: los estudiantes van al juicio”. El encuentro, al que concurrieron alrededor de 200 jóvenes, tuvo lugar en la Escuela Técnica N°2. Entre las instituciones presentes estuvieron Nacional, Libertas, Fátima, San Antonio, ENAPE, Escuela Cristiana Evangélica, entre otras. “Superaron todas las expectativas, quiero dar un justo reconocimiento a la actitud, el compromiso y el respeto en las audiencias, como así también reconocer la importancia que tiene el abordaje desde las escuelas”, expresó María Elisa Risé, secretaria general de Suteba Olavarría.
Durante la jornada se hizo una presentación de los trabajos realizados por los estudiantes. En las exposiciones, se pudo traslucir el compromiso y la seriedad asumida con respecto a la temática del juicio. Los trabajos fueron desde el abordaje de la identidad como un derecho fundamental “para conocer, crear y crecer”, pasando por registros e impresiones a partir de las experiencias vividas por los estudiantes que presenciaron el juicio, quienes destacaron “la valentía y el coraje de las víctimas-testigos al declarar”.
“Entrar ahí cambia un poco de uno, escuchar un testimonio hace repensar muchas cosas, incita a participar” sintetizaron estudiantes de ENAPE. Patricia Bavio, docente de la institución, destaco el valor de una reflexión colectiva “para que nada les permita olvidar”. Las palabras prosiguieron a la par de la elaboración de las 30.000 flores que fueron pensadas para homenajear a cada uno de los detenidos-desaparecidos de la última dictadura cívico-militar. Se dio a conocer, además, la muestra del Archivo Nacional de la Memoria “La historia a través de las luchas sociales”, en donde se destacó la importancia de reconocer al pueblo que luchó por los derechos sociales y políticos a lo largo de la historia. Luego, en el hall se descubrió una placa en reconocimiento a las víctimas-testigos que fueron estudiantes de la Escuela Técnica Nº2. De esta actividad participaron Carmelo Vinci, Eduardo Ferrante, Eduardo Santellán, familiares de Rubén Sampini e Ignacio Guido Montoya Carlotto. El objetivo de la placa, además de ser un reconocimiento institucional, fue “situar a la escuela como un lugar estratégico para la memoria reciente”. El reconocimiento institucional a ex estudiantes por su compromiso con la memoria
Las escuelas y el valor de un rol participativo
Al finalizar la jornada, se realizó un panel con la presencia de Victoria Montenegro (hija de desaparecidos, apropiada por militares y restituida a su familia biológica), Ignacio Guido Montoya Carlotto y Paulino Guarido (sobreviviente del centro clandestino de detención “El Vesubio”, docente y dirigente de Suteba La Matanza).
Los tres coincidieron en la importancia de que las escuelas asuman un rol protagónico y participativo en el abordaje de esta problemática. Montenegro contó parte de su historia y el proceso de reconstrucción identitaria por el que tuvo que pasar. Hasta sus 25 años creció “pensando que en nuestro país hubo una guerra contra la subversión. Crecí con un profundo desprecio por la vida, creyendo que había personas que debían vivir y otras no”. Sin embargo, hoy sostiene que desde la verdad logró reconstruir otra historia. “Ahora nuestro compromiso es con la verdad, la memoria, la justicia pero sobre todo con el futuro. Queremos que nuestro dolor no le vuelva a ocurrir nunca más a nadie. Y que cuando uno hable de los derechos humanos se piense en el respeto por la vida del otro” concluyó.
Ignacio Guido Montoya Carlotto también destacó la importancia y la presencia de la educación en la formación ciudadana desde una perspectiva crítica y reflexiva. Se mostró muy preciso al apostar y alentar la voluntad de cada uno en sus libertades de elección. “Todo lo que ustedes decidan hacer háganlo lo mejor que puedan, con la conciencia ciudadana como para que este país sea un poquito mejor. Somos una patria joven, puede haber errores por delante pero al menos tengamos la posibilidad de no repetir los mismos errores del pasado”, expresó.
Por su parte, Paulino Guarido reflexionó sobre la importancia de la presencia de estudiantes y docentes en los juicios. Luego de hacer referencia sobre su situación como detenido-desaparecido, profundizó sobre la relevancia de la realización de los juicios. “Este hecho es único en el mundo. Tiene que ser un orgullo para nosotros estar viviendo este tiempo”, señaló. Además reconoció el protagonismo de los jóvenes al asumir la responsabilidad por saber la verdad. “Es una alegría que nos da a los viejos maestros ver la responsabilidad y el entusiasmo con que ustedes abordan temas tan duros y difíciles y los alentamos a que sigan participando, estudiando, y que tengan su propia opinión” manifestó. La exposición de los panelistas, dio lugar a una ronda de preguntas por parte de los estudiantes. El anhelo por saber y descubrir es un valor que panelistas y estudiantes supieron apreciar, haciendo del taller un encuentro de reflexión genuina para multiplicar las esperanzas y un compromiso que posibilite el camino hacia la verdad.